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¿Qué hacer si un niño moja la cama?

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Mi hijo aún moja la cama, ¿me debo preocupar?¿qué puedo hacer?

El término médico de no ser capaz de controlar la orina se llama enuresis, también conocido anteriormente como “incontinencia nocturna” o “enuresis nocturna”. La coordinadora de Urgencias Pediátricas de Cosaga, Olga Fernández, te cuenta más.

¿Qué es la enuresis?

Es la micción involuntaria que ocurre por la noche cuando está dormido, pasada la edad en que un niño debería ser capaz de controlar la vejiga, que suele ser alrededor de los 5 años. La mayoría de nosotros pensamos que mojar la cama es algo que les ocurre solo a los niños pequeños, pero se trata de un problema que afecta a entre uno y dos de cada 100 adolescentes. Suele haber una predisposición familiar. Cada niño madura y desarrolla el control de la vejiga a su propio ritmo y pocos consiguen controlar la micción nocturna o durante el sueño antes de los tres años de edad. La mayoría de los niños aprenden a hacerlo en algún momento entre los tres y los cinco años, pero otros tardan más. Hasta que esto no ocurra, lo mejor es ser paciente, comprensivo y darle apoyo.

¿Qué ocurre en la enuresis?

En una persona con un control normal de la vejiga, cuando está llena, los nervios le envían un mensaje al cerebro. A continuación, el cerebro envía un mensaje a la vejiga para impedir que se vacíe de forma automática, hasta que la persona esté preparada para ir al baño. En la enuresis no existe ese mensaje. El niño es incapaz de reconocer la sensación de vejiga llena.

¿Qué tipos de enuresis hay?

La enuresis se llama primaria si nunca ha dejado de mojar la cama al menos seis meses seguidos. Se estima que el 15% de los niños de 5 años presenta enuresis primaria. Si consigue estar seco (más de seis meses) y vuelve a mojar, se llama enuresis secundaria.

¿Cuáles son las causas que favorecen la enuresis?

Suele ocurrir en niños sanos. La mayoría de las veces no se sabe la causa. Tampoco existe una causa única, en muchos casos se trata sencillamente de un retraso en el desarrollo de la maduración del niño. La tendencia de mojar la cama tiene un componente hereditario. El riesgo de orinarse en la cama por la noche es de cinco a siete veces mayor entre los niños con un padre o madre que se orinaba también, de niño, en la cama. Y aproximadamente, 10 veces más, si ambos padres fueron enuréticos. 

Los científicos han identificado genes específicos que causan la enuresis. La enuresis no es una condición médica grave, pero puede ser un problema difícil de llevar para los niños y la familia. Aunque no se conocen bien todos los factores asociados a la enuresis, estos son algunos que pueden favorecerla:

  • Alteración en el mecanismo del despertar: incapacidad para reconocer cuándo la vejiga se está llenando cuando está dormido. El niño tiene el sueño profundo y no se despierta a la señal de la vejiga llena.
  • Maduración tardía del control de la micción: todavía no ha aprendido a retener/vaciar la orina, ya que la comunicación entre el cerebro y la vejiga puede tardar en desarrollarse.
  • Poliuria nocturna: el cuerpo del niño produce demasiado orina durante la noche. Puede ser por beber mucho antes de acostarse.
  • Disminución de la capacidad vesical: la vejiga del niño es pequeña o no se ha desarrollado lo suficiente como para retener la orina durante una noche completa.
  • Problemas hormonales: una hormona que recibe el nombre de hormona antidiurética hace que el cuerpo fabrique menos orina por la noche. Algunos niños no tienen una cantidad suficiente de esta hormona, lo que hace que produzcan demasiada orina mientras duermen.
  • Estreñimiento crónico:  el intestino lleno de heces presiona sobre la vejiga y esto puede conllevar problemas para retener y vaciar la orina.
  • El género: sobre todo los varones.
  • Infecciones de orina.
  • Enfermedad leve, cansancio o cambios o tensiones en casa.
  • Con frecuencia, pueden existir otras enfermedades asociadas como, trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) y el síndrome de apnea obstructiva del sueño (SAOS).
  • Problemas psicológicos: estrés, conflictos familiares o escolares, celos por el nacimiento de un hermano, etc.

¿Existen tratamientos eficaces para solucionar la enuresis?

La enuresis suele remitir conforme el niño crece y raramente sobrepasa la adolescencia, pero a algunos niños les afecta gravemente en su vida diaria, limitando sus actividades. Hay dos tratamientos para solucionar o controlar la enuresis:

  • Alarma de enuresis: enseña al niño a responder a las sensaciones de la vejiga. Se hace con un aparato que emite sonido, luz y/o vibración con las primeras gotas de orina. Cuando el sensor detecta la humedad, el emisor se dispara para despertar al paciente. Exige motivación, esfuerzo y colaboración del niño y familia. Se debe colocar la alarma cada noche. Cuando suene, el niño o adolescente debe despertarse, dejar de orinar, desconectar el sistema, ir al baño, cambiarse la ropa si se ha mojado y volver a conectar la alarma de nuevo antes de acostarse. Este método exige la colaboración de la familia, sobre todo al principio y en los niños más pequeños. El tratamiento suele ser largo, alrededor de 4-5 meses, salvo algunos casos. También puede despertar a otros miembros de la familia (sobre todo si duermen en la misma habitación). En este caso se pueden usar alarmas con luz o vibración sin sonido.
  • Desmopresina: es una medicina que disminuye la producción de orina por la noche. Es ideal para los campamentos y una alternativa a la alarma cuando no está indicada o no puede utilizarse. Debe evitar beber desde una hora antes hasta ocho horas después de su toma. Si el niño presentase vómitos, diarrea, dolor de cabeza o adormecimiento se debe dejar el tratamiento y consultar.

Los dos tratamientos requieren ser constantes y la supervisión del pediatra. Se suelen necesitar varios meses para solucionar la enuresis. Puede haber recaídas que exijan nuevos ciclos o cambios de tratamiento. También se debe controlar lo que beben antes de acostarte en la cama. La gente con enuresis nocturna puede tomar algunas medidas básicas para impedir que su vejiga se sobrecargue, reduciendo la cantidad de líquido que bebe antes de irse a la cama. Se pueden reducir las probabilidades de mojar la cama si va al baño a orinar justo antes de acostarse. Puede ser útil evitar algunos alimentos que pueden irritar la vejiga. Entre ellos el chocolate y los refrescos u otras bebidas con gas y que contengan cafeína.

¿Cómo podemos ayudar al niño a superar la enuresis?

Se le puede ayudar con estas medidas:

  • Evitar que se sienta culpable, la enuresis ocurre en muchos niños y no es voluntaria.
  • Vigilar que orine antes de acostarse y que no beba líquidos justo antes de dormir o por la noche. Las bebidas con cafeína se deben evitar siempre.
  • Mantener siempre una actitud positiva. Que el niño anote en el calendario cada mañana si mojó la cama. Premiar al niño por las noches secas y ofrecer apoyo, no castigo, por las noches húmedas. Si ve que no mejora, mejor no insistir con el calendario porque se frustrará.
  • Proteger la cama. No usar pañal para dormir. Se puede utilizar un protector del colchón bajo la sábana o mejor, absorbentes de cama con/sin alas, encima de la sábana.
  • Dejar colaborar en el cambio de sábanas mojadas. Esto le enseña a tener responsabilidad.
  • Tampoco ayuda a solucionar la enuresis entrenar al niño durante el día a retener la orina, cada vez más tiempo, cuando siente ganas.
  • Es perjudicial que “corte el chorro” mientras esté orinando. No se lo aconseje, ya que puede alterar la función de la vejiga.
  • No funciona levantar al niño por la noche para ir a orinar. Suele estar dormido y no se da cuenta de lo que hace. No vale la pena tomarse esta molestia y no va a mejorar ni curar el proceso.

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