El Alicante, rival del COB, obligado a mirar hacia arriba

El jugador del Alicante Steinarsson busca lanzar a canasta en el encuentro ante el Estudiantes.
photo_camera El jugador del Alicante Steinarsson busca lanzar a canasta en el encuentro ante el Estudiantes.

El Alicante, con los play off entre ceja y ceja, calibrará mañana la mejoría del COB en un duelo entre dos equipos que buscan consolidar sus objetivos

Las bondades del AVE han acercado en este 2022 a Ourense y Alicante. Dos ciudades de LEB Oro que pondrán mañana a juego sus buenas sensaciones de los últimos días. Los ourensanos, tras los pequeños grandes terremotos en los despachos y un rendimiento con más dudas que certezas en el parquet, quieren seguir con la sonrisa navideña dibujada en el rostro. Los alicantinos, por su parte, lidian con la presión de mirar hacia arriba y están consolidados en los puestos que dan acceso a los play off tras dos triunfos consecutivos.

Y es que el Alicante ha vuelto a apostar esta temporada por una plantilla de nivel, con alternativas en varias posiciones y un nombre en la competición. Firmaron a piezas cotizadas en el mercado y eso solo se hace con números y buenas ofertas. Como otros tantos equipos de la LEB Oro (el COB lo sabe muy bien), no van sobrados de pivots puros precisamente, uno de los debes de los alicantinos que recientemente se metieron de lleno en la subasta por el inefable Kasibabu, que voló a Palencia.

Variedad

Por fuera, el sentir los colores del alicantino Arcos, el valorado Steinarsson y el experimentado lucense Chapela dirigen el timón de la nave en un tridente de garantías. Los puntos desde el exterior son cosa de un Blaylock al que le está costando trasladar sus números del pasado curso en Portugal. Completa esa batería un Rakocevic que conoce al dedillo las pistas de la LEB Oro desde hace más de una década.

La solidez de Matulionis, la suma de Gatell y Parrado y la referencia de un McDonnell capaz de hacer muchas cosas bien completan una nómina de jugadores de talento contrastado que parece que van perfeccionando su química colectiva.

Al frente de la nave, Rafa Monclova. El sevillano fue un clásico sobre el parquet y llegó al banquillo alicantino este verano aceptando el reto de dar un paso más en una ciudad exigente por naturaleza con el deporte. Que se lo pregunten a sus paisanos futbolísticos.

Pero corren buenos tiempos a orillas del Mediterráneo. Tres victorias en los últimos cuatro partidos para estar en esa parte media-alta de la tabla. A eso se enfrentará el COB. Con Iria Uxía Romarís en el banquillo, Zamora siendo el de toda la vida y pendientes de tomar decisiones (o de no hacerlo), los ourensanos buscarán en el Pedro Ferrándiz abonarse a la sonrisa.

Te puede interesar