El COB no despeja las dudas

Nos queda mucho que recorrer hasta estar bien. Tenemos varios jugadores que están todavía fuera de forma y especialmente en defensa no me ha gustado nada el equipo". El resumen de Gonzalo García de Vitoria del partido amistoso ante el Ponferrada (LEB Plata) obliga a la tila al aficionado más exigente. Confirma los problemas de un COB que no acaba de dar pasos adelante convincentes, más bien parece estancado en un juego sin equilibrio ni continuidad condicionado por las limitaciones físicas de muchos de sus jugadores, especialmente los interiores. Ante un equipo de menor categoría y muy inferior físicamente, el COB nunca fue capaz de sentirse dominante. Jugó bien (mejor) y pareció resolver el partido en los 13 primeros minutos de la segunda mitad (57-69), pero incluso ahí sin brillo alguno. En sus mejores momentos pudo correr con criterio, con Mikel Úriz o David Navarro en la dirección y sobre todo con Joan Tomás asumiendo el peso anotador del equipo. El alero se suma al carro de los aceptables para estas alturas de la pretemporada. Un listado en el que están todos los exteriores, con más o menos defectos que pulir. Pero no hay mucho más que destacar de un COB que volvió a salir frío al partido y que juega lastrado por un juego inoperante. García de Vitoria sabe que quedan diez días para el inicio de la liga y "forzó" la máquina con Arkeem Joseph para tratar de dar confianza al jugador que tiene que sustentar al equipo cerca de los aros, pero el americano juega con grilletes. Lento, pesado y sin confianza. 14 puntos y 8 rebotes, pero ante un equipo sin oposición física. Los números engañan con un jugador clave y Massine Fall está todavía peor físicamente. Aaron Menzies pagó el plan del técnico regalándole a Joseph sus minutos y queda claro que su rol y el de Fall será turnarse para dar relevos . Kevin van Wijk está mejor que ellos, pero todavía lejos de su nivel óptimo y Álex Mazaira está más cerca de los "cincos" que de su compañero de puesto. Y eso es todo lo que tiene el COB en el juego interior, casi nada. Jugando todo el partido a sota, caballo y rey, el COB fue a remolque la primera mitad (40-33) por falta de intensidad defensiva y con una espesura ofensiva constante. Un correcalles en el primer cuarto y pinceladas individuales en el segundo para firmar el expediente. Tras el descanso llegó lo mejor, pero sin nada de lo que presumir. Preocupante por el margen que queda para el primer partido de liga (semana y media), aunque García de Vitoria lo estira un poco más: "Sabemos que tendremos que ir evolucionando con el paso de las jornadas y no vamos a meternos más presión. Hay jugadores a los que les faltan dos o tres semanas más y algunos todavía no han llegado". No pinta bien, la verdad.