Coruña: solo vale ascender

El Ibereólica Renovables Ourense prepara el partido de mañana en el Pazo (19:00 horas) con problemas físicos en la plantilla que condicionan su rendimiento. Enfrente tendrá a un Básquet Coruña todavía más castigado por las lesiones, pero al que el enorme nivel de sus jugadores y la profundidad de banquillo con la que cuenta le permite seguir siendo uno de los mejores equipos de la LEB Oro. Desde la llegada a la presidencia del ourensano Roberto Cibeira el club herculino no ha dejado de crecer hasta ser ya uno de los proyectos más sólidos y ambiciosos de la categoría. De puertas para afuera el ascenso es un objetivo con el que se ilusionan. De puertas para adentro es el único resultado válido. Si no es esta campaña será la siguiente o la próxima, pero la directiva tiene claro que llevarán A Coruña por primera vez en su historia a la Liga ACB. Para pelear por el único billete que hay en juego esta temporada, el Básquet Coruña se ha armado hasta los dientes. Una plantilla sin apuestas y conformada con jugadores referentes en la LEB Oro en todas las posiciones. Una retahíla de "estrellas", muchas de ellas además polivalentes, que ponen el listón alto para cualquier rival. Empezando por la capacidad física del equipo. Desde el puesto de base, con Augustas Peciukevicius, el Coruña puede marcar la diferencia desde la defensa. Jugadores como Romaric Belemene, Taiwo Badmus o Rolandas Jakstas tienen intensidad para defender en casi todas las posiciones. Además, el club ha fichado sobre la marcha más pesos pesados. Primero llegó el alemán Justin Raffington y después regresó a la liga Gary McGhee. Dos "cincos" con músculo y centímetros para dominar las dos zonas. Pero además hay muchos puntos y calidad en la plantilla, en todas posiciones. El regreso de Zach Monaghan no es solo un guiño a una afición que sigue esperando turno en Riazor. El norteamericano es letal como base o como escolta y más peligroso cuanto más importante o igualado esté el partido. Por fuera todavía quedan Dago Peña u Osvaldas Matulionis. El dominicano ya dominó la LEB Oro en anteriores etapas y a la que esté "fino" volverá a hacerlo. El lituano es un clásico en los mejores proyectos de la liga y lo justifica con una de las mejores muñecas de la competición. Más de lo mismo con Javi Vega, aunque en este caso desde la versatilidad de un interior con peligro cerca y lejos del aro. Un rival que asusta a cualquiera y que llega al Pazo buscando la continuidad que no le ha permitido el covid y la consistencia que le dará el paso de los partidos. La temporada pasada empezó perdiendo los dos primeros de la liga y solo la pandemia paró en seco a un equipo lanzado a por el ascenso directo. Con menos presión, pero con la misma o más fiabilidad el próximo rival del COB se cuelga el cartel de favorito en una temporada que poco a poco va cogiendo velocidad de crucero. Mañana, el primer derbi.