Día 1 de la Fase 1: ¡Perfecto!

Holaaaaaaaa!!! Vengo sentada en mi sillita del coche, con mi mamá y la Aya Fisna. A mi papá le hemos dejado en casa impartiendo clase (torturando) a sus alumnos de Bilbao y Vitoria. Le hemos robado el iPad y, como aún está con su cursito, voy a escribir yo la columna y se la mando a Ramón y Cajal. Perdón, me dice mi madre que es Ron y Montero y que estos son dos personas distintas … Es un buen día para escribir, porque hoy he hecho moitas cosiñas y todas boas, en cambio, si preguntas ayer a las dos máquinas de reñir que viven conmigo… Pero como dice mi primo Adrián, "eso ya pasó". Hoy era un día especial, hemos pasado de fase, la única manera que tenía mi padre de conseguirlo este año, porque madre mía, vaya segunda vuelta nos ha dado el "míster". Según me contaban, a partir de ahora podemos hacer más cosas y para celebrarlo nos hemos ido las tres generaciones de mujeres de esta casa, a visitar a la cuarta. Antes hemos pasado por la finca del abuo Pepe, he corrido detrás de las gallinas -como corren las jodías- y me ha decepcionado ver que no han crecido nada, pensé que en este tiempo estarían ya como Balaban. Después nos hemos ido a la aldea a visitar a la Aya Bisa, que es la mamá de la aya Fisna, que a su vez es la mamá de mamá, y mamá es la mamá de Leire, que soy yo y que no soy mamá de nadie, pero que ayer me escapé de la cuna… Ya está, lo he dicho, salté de la cuna y me fugué. Mis papás están ahora acojonados, pero yo estoy moi orgullosa y a la Tata le hace gracia. Yo estaba muy contenta porque hace muuuucho que no la veo. Antes iba todos los martes a visitarla, a jugar con su perro "Muñeca" y a comer galletas, pero con esto del conoravirus... Al llegar me he puesto moi triste, porque me han dicho que no podíamos bajarnos del coche, sólo era posible saludarla por la ventana y yo quería darle un bico moi grande. Las penas se me han pasado cuando me ha sonreído y me ha mandado un beso volador. El primer día de la fase 1 ha sido genial, espero ya con ansia la fase 2 para irme a tomar unas cañas… ¡Qué noooo, es broma! Yo soy más de vino.