El presidente del club, Camilo Álvarez, confía en contar el apoyo del Concello y la Diputación para hacer crecer un proyecto ilusionante y viable
Recién iniciado el verano, el COB entra en un momento clave. Lejos de los partidos. De los ascensos o del miedo a descender, pero decidiendo qué cruce tomar. El club no descansa y tiene claro que es ahora cuando se decide entre seguir creciendo o deshacer lo andado. Su presidente, Camilo Álvarez pide confianza a la afición, implicación a los dueños y paciencia a su entrenador.
"Estamos cerrando la temporada 2018/19. La semana pasada entregamos la documentación que faltaba en la Secretaría Xeral para o Deporte y con ese ingreso liquidaremos con la Federación y recuperaremos el aval de la pasada campaña. Pero ya toca renovar el de la temporada 2019/20 y realizar correctamente la inscripción". No habrá sorpresas. El COB hace años que cumple con todos sus compromisos. Desde la llegada de Camilo Álvarez a la presidencia las cuentas no han dejado de mejorar, pero con "truco": "La cuentas cuadran siempre, pero también porque yo, cada vez que hay un problema hago un esfuerzo personal. No puedo estar siempre solo tirando del carro". Y añade: "El 30 junio una vez más el club estará al día con todo el mundo y además, a final de este año, habremos terminado con la deuda histórica que este club tenía con la Seguridad Social y con Hacienda. Llevamos dos años trabajando en silencio y pagando todos los meses una cantidad muy importante. Creo que es un trabajo que merece ser respetado".
Todas las fichas cuadran, pero es el momento de saber a qué puede y quiere aspirar el COB. Parte de esa respuesta deben darla los máximos accionistas: "Hace unas semanas que estamos en conversaciones con los dueños del club (Concello y Diputación) y son ellos los que va a decidir qué rumbo toma el club".
Los dos dueños igual
Desde la directiva tienen claro por dónde debe pasar el proyecto: "Nuestra propuesta es que la Diputación pueda mantener la ayuda que ya estamos recibiendo y que el Concello ponga una cantidad similar, bien sea como patrocinio o como subvención, lo que consideren más oportuno. Yo me comprometo a seguir consiguiendo el resto de presupuesto, que es la mayoría, de forma privada, y a asumir a título personal el aval (150.000 euros) que hace falta para poder competir".
Álvarez pide compromiso, no reclama firmas: "No pido ningún tipo de papel de inmediato, ni mucho menos. Pido un compromiso. Siempre voy a confiar en las personas a las que les doy la mano. Antes de las elecciones estuvimos hablando con los partidos y todos se comprometieron públicamente a estabilizar el proyecto del Club Ourense Baloncesto".
En las últimas temporadas el COB ha peleado por el ascenso teniendo uno de los presupuestos más bajos de la liga. Desde el club tiene claro que se puede consolidar la ilusión por una Liga ACB que el club llegó a ganar en la pista y la afición reclama cada año en la grada: "Hay afición, hay una base deportiva, hay cuerpo técnico y tenemos gestión. Estamos en un momento en el que merece la pena apostar por el Club Ourense Baloncesto. Este equipo estaba compitiendo por Ourense en el mes de junio y desplazando a más de 600 personas a una ciudad como Bilbao. La cuidad vuelve a hablar de baloncesto y a estar ilusionada con este deporte". Y mantiene un mensaje de optimismo: "Llevamos varias reuniones y tenemos el compromiso de que eso que hemos hablando se va a llevar adelante, pero entiendo que necesita un tiempo y lleva unos pasos. Si hay ese compromiso esta misma semana nos ponemos a avanzar de cara a la próxima temporada".
Una apuesta por el COB que no es solo económica. Camilo Álvarez pide "refuerzos" para la directiva: "Llevamos pidiendo años que los dueños sean partícipes en el día a día del club. Pedimos que entren en el Consejo de Administración representantes de las dos instituciones. Y aprovecho para recordar que este club está abierto a gente que quiera venir con ideas y con ganas a sumar. Queremos hacer fuerte este proyecto. Queremos seguir creciendo".
"Habrá equipo en LEB Oro"
El presidente confía plenamente en las dos instituciones, pero, si no llegase ese apoyo, es tajante. Sobre el futuro del club y el suyo personal: "Ourense no se va quedar sin baloncesto. Si los dueños responden será con un proyecto que va a ilusionar todavía más a la ciudad. Si no contamos con ese apoyo yo voy a inscribir el equipo igual en LEB Oro, porque Ourense no puede quedarse nunca sin baloncesto. Ahora bien, yo al día siguiente dimito y dejo ahí el cargo. Soy sincero y estoy convencido de que eso no va a pasar. Confío plenamente en lo que me han transmitido y en que vamos a contar con el apoyo de los dueños del club".
Mientras no hay decisiones definitivas el club no puede avanzar deportivamente. El presidente es consciente de la premura de tiempo, pero pide "tranquilidad a los aficionados. Esta semana esperamos poder empezar a trabajar de cara al futuro. El club está estabilizado, hay afición, hay entrenador y hay gestión. Confío y tengo el compromiso de que los dueños van a dar un paso al frente".
Entrenador y jugadores
La primera consecuencia sería la renovación de un entrenador que también ha pedido públicamente un proyecto estable: "Gonzalo (García de Vitoria) reclama un proyecto y yo suscribo sus palabras una por una, pero no le puedo dar un presupuesto mientras no lo tengamos, no le puedo prometer lo que no tengo. Pondré todo y más para que siga con nosotros porque es un activo del club, eso que no lo dude nadie".Y termina dando pistas de fichajes y renovaciones ya apalabradas: "Hay jugadores que dejaron sus pertenencias aquí en Ourense. Más no puedo decir".
