La contundente victoria ante el Básquet Coruña, la sexta consecutiva a domicilio, permite al COB cerrar la jornada entre los cinco primeros de la LEB Oro
El Río Ourense Termal, con su apabullante triunfo a domicilio (el sexto consecutivo de la temporada lejos del Pazo) ante un pobre y desalmado Leyma Coruña, presentó su candidatura a todo en un play off de ascenso que ya roza con la yema de los dedos y al que si nada se tuerce llegará sin ningún tipo de presión.
Dieciséis victorias en 25 encuentros. Un bagaje que ya no sorprende ni a propios ni a extraños. Este domingo, en el siempre peculiar Polideportivo municipal de Riazor, una nueva exhibición, tanto de acierto ofensivo, como de nivel defensivo (especialmente en la segunda mitad).
Y eso que el partido comenzó con demasiado errores. Hasta en cinco ocasiones se paseó el balón por el aro del Coruña hasta que Masters anotó los primeros puntos del COB. Cuatro a dos en el electrónico y tres minutos disputados que se convirtieron a continuación en un intercambio de canastas con Mirza Bulic como protagonista. El balcánico aprovechó los problemas físicos de Van Wijk para abrir una pequeña brecha que Monaghan, con un triple estratosférico amplió hasta los seis puntos (11-6).
Ahí el conjunto ourensano se puso el mono de trabajo y de la mano de un imparable Ott, que desquició a Jeff Xavier, y de Rozitis, endosaron un 2-10 parcial para darle la vuelta al marcador una vez cumplidos los diez primeros minutos (15-18).
De nuevo, el COB se trastabilló en el inicio del segundo periodo. Cinco errores consecutivos en ataque, producto de la precipitación, dieron oxígeno al Coruña, que devolvió el parcial en solo un minuto y medio (22-18).
Con la entrada en el campo de Masters y el trabajo de Ott en los dos lados del campo, el COB cortó la sangría, igualando en varias ocasiones pero marchándose al descanso con un triple en el último segundo marca de la casa de Monaghan (37-33).
Los dos puntos de Bulic en el inicio de la segunda mitad fueron el último atisbo de dominio de un Básquet Coruña al que le falta ser coral.De repente, con
Vidal y Sergio Rodríguz en la cancha, el COB cambió el paso. Defensa más viva, manos rápidas y acierto exterior se unieron para que el uruguayo encontrase el ritmo. Bajo la música que marcaban sus cortas zancadas, el Río Ourense Termal pasó del 39-33 al 43-49 en solo cuatro minutos.
Ahí, con el conjunto de García de Vitoria ya mandando, llegaron los últimos coletazos de los herculinos, que afrontaron los últimos 10 minutos don cinco puntos de desventaja.
Confiados por la excelente trayectoria que llevan, los ourensanos cerraron el partido como los grandes. Tres triples seguidos de Sergio Rodríguez, Zamora y Ott cayeron como un jarro de agua fría en la cancha de Riazor ante la desesperación de Monaghan y Bulic.
El cuarto triple de Ott fue la puntilla del encuentro a falta de cuatro minutos y medio (54-67). A partir de ese momento el partido bajó de intensidad y de nuevo, Mirza Bulic, se encargó de que la desventaja no creciese mucho más.
Al final 63-78, victoria y la sensación de que se acercan semanas muy divertidas para el COB. Toca pensar a lo grande.
