Técnica romana en Muíños para un puente del siglo XXI

TÉCINICA ROMANA

El proyecto de la Diputación contempla un arco abovedado con piezas de hormigón prefabricado

Técnica romana en Muíños para un puente del siglo XXI
Puente en Muiños levantado con piezas de hormigón pregabricado (Foto Grupo Rodiñas)
Puente en Muiños levantado con piezas de hormigón pregabricado (Foto Grupo Rodiñas)

Un pequeño regato en Muíños está siendo escenario este otoño de una técnica constructiva pionera en España, el flexiarch. Se trata de la adaptación de sistemas constructivos romanos, en cuanto al funcionamiento del arco, con técnicas y materiales del siglo XXI. “No se trató de imitar a los romanos, sino de hacer formas resistentes que ya manejaron con soltura los romanos, y es el trabajo a compresión, sin hierros”, explica Manuel Durán, ingeniero de caminos ourensano y uno de los mayores expertos en puentes del mundo, a quien la Diputación de Ourense le encargó en el año 2020 el proyecto de reposición del paso en la OU-1202 que une Muíños con la OU-540.

Puente construido con una técnica constructiva pionera en España, el flexiarch
Puente construido con una técnica constructiva pionera en España, el flexiarch

El puente se colapsó en diciembre de 2019 y, pese a que temporalmente se restableció el tránsito con la instalación de una batería de tubos, la Diputación encargó un proyecto para la restitución del viaducto. Una solución nada sencilla dada la ubicación y las condiciones del terreno, junto al embalse de As Conchas. “Inicialmente, se plantearon tres soluciones, y el sistema más económico era este, también el más rápido y ecológico al tratarse de piezas prefabricadas, los sobrantes del hormigón se reaprovechan y no pasa lo que en obra, que los restos se tienen que reciclar, través de un gestor autorizado”, explicaba Durán, agradeciendo la apuesta del ingeniero de la Diputación por una solución que no hay experiencia constructiva en España, flexiarch; y al Grupo Rodiñas, por su espíritu emprendedor e innovador.

Rápido y ecológico

El proyecto, que ronda los 300.000 euros de presupuesto, se basa en la creación de un puente de bóveda, a partir de piezas prefabricadas en fábrica, unidas en la parte superior igual que una bisagra y, ese abisagrado permite que se puedan trasladar extendidas en el suelo (como si fueran vigas planas). “La escasez de mano de obra y los oficios en la construcción hace que los productos prefabricados sean el futuro, las llevas a obra y las montas con rapidez”, comentaba ayer Durán, sobre una técnica que lleva 20 años implantada en Inglaterra e Irlanda, pero que en España no se había desarrollado hasta la fecha. “Construir como los romanos, pero con medios y tecnologías del XXI” comentaba Daniel Hermosilla, CEO del Grupo Rodiñas, que esta semana supervisaba la instalación del arco en el punto kilométrico 13,350. Este proyecto, comentaba Durán, puede abrir las puertas a un nuevo nicho de mercado y agilizar la reconstrucción de puentes, pero también en el sector de la vivienda y demás obra pública.

Instalación de los prefabricados del nuevo puente sobre el arroyo de Parada de Ventosa, en Muíños.
Instalación de los prefabricados del nuevo puente sobre el arroyo de Parada de Ventosa, en Muíños.

Si todo marcha según lo previsto, los expertos calculan que el sábado estará el arco montado. “Este sistema permite agilizar los trabajos”, incidía Durán, quien añadía además que “la bóveda es más bonita, encaja mejor que un puente de vigas”. Opinión de un experto en puentes romanos y medievales, en una intervención en la que es inevitable su comparación con Ponte Pedriña, el puente romano de la Vía Nova que se conserva bajo las aguas del embalse de As Conchas, a escasos metros de allí. “El arco lo utilizaron los romanos prácticamente en todos los puentes. Incluso el puente de Ponte Pedriña es un arco rebajado, no es un semicírculo, y el arco que estamos montando, también rebajado, hay una vinculación indudable”, concluía Durán.

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