Cartas al director

El problema de Vilariño de Conso no es el racismo

"Cuatro concellos necesitan el doble de nacidos hasta 2022 para tener colegio". Desconozco si los otros concellos mencionados en el artículo han tratado de dinamizar su parcela de rural con la llegada de familias inmigrantes. De lo que puedo dar fe es de que los vecinos de Vilariño de Conso, conscientes desde hace muchos años, de la crítica situación que se avecinaba:

- Llevan años haciendo llamamientos a familias con niños en edad escolar, por toda Galicia y el Estado español, utilizando incluso a las televisiones nacionales para ello. 

- Han recibido en estos últimos años a numerosas familias, de muy distintos puntos de dentro y fuera del Estado español, y lo han hecho con el natural afecto que les caracteriza. 

- Nunca han rechazado a nadie por razón de su nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social, porque no está en su naturaleza.

En cuanto a que "Una familia siria con cinco niños fuera rechazada por un sector de pueblo" quiero aclarar que:

- La familia siria no encontró segura para sus hijos la edificación que el Concello seleccionó para alojarlos.

- La edificación que el Concello seleccionó para alojar a la familia siria no hubiera podido nunca ser su vivienda (ni la de ninguna familia, ya fuera de origen gallego, vasco o andaluz) dado que aloja dependencias del Centro de Salud (como el baño del personal y el almacén), desde que la reciente reforma del Centro no subsanara las deficiencias e irregularidades para las que fue concebida. Y cualquier otro uso de esta edificación hubiera requerido permiso del Sergas.

- Sin embargo, a escasos metros de distancia de esta edificación existe una vivienda, hogar de distintas familias a lo largo de su historia, actualmente desocupada, de la que nadie pareció acordarse para alojar ni a esta, ni a ninguna otra familia llegada de fuera de Vilariño de Conso, en los últimos años. 

Por último, desconozco los motivos que llevarían a nadie a insinuar siquiera que algunos de los vecinos de Vilariño de Conso rechazan a personas de otras latitudes, a hacerlo en los medios, a encrespar a un pueblo, a enfrentarlo... siendo falso.