Cartas al director

Fútbol en vena

Parece evidente, a tenor de las contundentes declaraciones de todos los organismos tradicionales del fútbol profesional, que el único porqué para que unos cuantos clubes europeos hayan decidido dar un paso adelante creando una Superliga Europea es económico. 

Los mandatarios de los grandes clubes ingleses, italianos y españoles quieren exprimir hasta el céntimo el maná del fútbol creando una competición en paralelo y al margen de las competencias y directrices de la FIFA y de la UEFA, e incluso de la Federaciones Nacionales.

Por lo que parece, a los dueños y señores de los grandes clubes europeos no les basta con las competiciones nacionales, como la Liga y la Copa, con las europeas, como la Champions y la UEFA

League, e incluso con el mundial, y quieren organizar su propio evento, con un calendario a caballo entre las mencionadas competiciones, que ya de por sí está más que apretado. 

Al margen de consideraciones sobre la oportunidad y consecuencias de esta iniciativa, si la primera y principal razón de esta pretendida competición es la de nutrir de Euros la arcas de los clubes promotores de este proyecto, no cabe duda de que va a generar una gran polémica, y, si prospera, un empacho de fútbol y el hartazgo de una afición que no va a ser capaz de digerir tanto fútbol en vena como nos quieren inyectar.