Cartas al director

Yo, a pesar de todo, sigo

Sí, a pesar de la situación caótica que impera en esta sociedad, yo no me vendo por un plato de lentejas. He cumplido 83 años, pero mantengo mi mente lúcida. En esta sociedad, tanto en el orden político como religioso, abundan los vividores, arribistas, trepadoras, personas camaleónicas que cambian de color según las circunstancias. 

Mi seguridad y certeza plena, no me viene de estos sacamuelas parlanchines.  Mi seguridad viene de una persona: Cristo Jesús, Hijo de Dios y Dios como el Padre. En la prolongada experiencia de mi vida, y sobre todo viendo la situación actual, compruebo como la única manera de que una persona se realice íntegramente, consiste en la fe en esta Persona Divina, no buscan otra manera de existir y buscar la felicidad, la ilusión, la esperanza y la paz, fuera de Él porque no la encontrarán.