Cartas al director

OBITUARIO: Doctor Don Manuel Rubén Rodríguez López

Ayer nos dejó Rubén (D.  Rubén),  un gran médico por convencimiento y vocación,  un buen compañero, un jefe querido y respetado, una persona entrañable, un ejemplo para todos. 

En momentos como este,  lo habitual es contar lo que fue la persona que se va y lo que hizo durante su vida, en el caso de Rubén creo que lo realmente importante es cómo fue y cómo hacía las cosas. Los que tuvimos la suerte de trabajar con él sabemos que era un hombre bondadoso con los demás, un compañero de trato agradable, considerado y divertido, un jefe cercano que te respetaba como profesional y siempre sabía darte un buen consejo cuando lo necesitabas (cosa que ocurría con frecuencia),  un médico excelente que siempre buscaba el consuelo para sus pacientes. 

Se dice que la vida te devuelve lo que tú das y debe de ser verdad querido Rubén,  porque a ti te ha devuelto el respeto y el cariño de todos los que te hemos conocido y, sobre todo, te ha dado una familia admirable que durante estos años de dura enfermedad ha estado continuamente a tu lado con esa demostración de amor y dedicación. 

Gracias por los buenos momentos que hemos compartido,  por todo lo que nos has enseñado y, sobre todo,  por habernos hecho un poco mejores. No te olvidaremos porque siempre tendremos presente tu ejemplo de vida.