Recientemente publicó La Región que “el día después” de la reforma de la Plaza preocupa a la Corporación Local de Ourense. En la actualidad esta corporación está muy enfrentada y sus órganos de gestión lo conforman apenas tres concejales, dirigidos por el alcalde, ayudados por un buen número de asesores.
Por ello en la asociación que aglutina a los comerciantes de la Plaza se aprobaron dos mociones para pedir al Gobierno local, por un lado, un proyecto del inmueble y su entorno y por otro, que se tenga en cuenta la opinión de los afectados, actuales arrendatarios de los distintos locales de la Plaza, a través de la asociación que los representa, y también la opinión de la ciudadanía consumidora, mediante los canales establecidos para ello.
Con el objeto de abordar el futuro de la Plaza de Abastos y su entorno, actualmente en plena obra de reforma, la Asociación de Comerciantes, convocó una reunión de afectados e implicados, para el día 15 de marzo, a la que asistieron los comerciantes afectados y los líderes de los distintos grupos políticos que componen la Corporación Local, salvo el alcalde Gonzalo Pérez Jácome que no asistió y además de estar ausente, cargó contra el colectivo de comerciantes, afirmando que él es el alcalde y es quien debe convocar estas reuniones y, por tanto, que esperen a que la convoque, cuando lo crea oportuno, olvidando que como alcalde se debe a la ciudadanía y que es alcalde porque así lo quiso con su voto.
El grupo de comerciantes de la Plaza de Abastos, en donde tienen su forma de vida y su futuro y el de su familia y que está formado por distintos profesionales de todas y cada una de las actividades que se pueden desarrollar en esta Plaza, insisten en la necesidad de planificar la urbanización del entorno, la distribución de locales según las distintas actividades, la mejora del rianxo e integrar el parking existente y conectarlo con el edificio de la Plaza, mediante un paso soterrado que permita el acceso directo y cómodo de los usuarios, protegidos de las inclemencias del tiempo. Parking que es imprecindible, en la actualidad, en un centro comercial, y aprovechar el existente en la Alameda, puede resultar práctico, económico e inmediato.
Los partidos de la oposición mostraron buena disposición para forzar al Gobierno de Jácome a dar los pasos necesarios para poner en valor la obra de reforma de la Plaza de Abastos.
Con este panorama no es de extrañar que en la Corporación Municipal estén preocupados. Es mejor prevenir que lamentar.
