Cartas al director

Jordi Évole, el Papa, Messi y Dios

El domingo La Sexta emitió una entrevista de Jordi Évole con el papa. 

El afamado periodista ha cogido un filón por el que nadie le hace sombra. Tiene el respaldo de cuanta gente este deseosa de ver cómo bombardea con preguntas teóricamente comprometidas a todo personaje público que se preste a ser lidiado por el que se cultivó su propia fama.

Se le ve feliz con sus manojos de preguntas probablemente pactadas, ¿o no? Da igual. En la última entrevista emitida por La Sexta, le toco hacer un vis a vis con el Papa Francisco, puso su estilo en casi todos los comentarios cruzados. Nos falta saber si cuando compara a Lionel Messi con Dios eso lo está creyendo, así de crudo se lo presentó a su santidad, quien le rectificó que no, Messi no es Dios. Pero Évole asintió de forma bien firme de que él sí lo creía. Bueno ya sería que el llamado todopoderoso se bajara al ruedo para colocar el esférico en la portería del equipo contrario a sus colores.

En el transcurso de la entrevista a Jorge Mario Bergoglio, a ojos de este humilde paisano aparte de mezclar lo humano con lo teóricamente divino, en un momento se sacó una concertina que más bien se pudo haber sentado en ella y no confundir la seguridad nacional con lo bonito que es ponerse del lado de los ilegalmente invasores ¿o no? Las fronteras son para serlo, si no se quitan y todos nos volvemos sumamente solidarios para quedar como unos buenazos a ojos internacionales, y nos veríamos nosotros saltando otras fronteras para dejarles sitio a los por ahora intrusos. Que se sepa de momento nadie de los que dicen liberar fronteras se ha hecho cargo de ningún lote de inmigrantes y ocupándose íntegramente de su cuidado, muy solidarios pero con el dinero de los demás.

De justicia es decir que el papa desbordó inteligencia con frases para guardar, se puede ser mal pensado y creer que todo estaba estudiado de antes, suele haber un pacto. Lleva una buena trayectoria en su labor de consejero pacificador, aunque en la parte divina tendrá que esperar.