Cartas al director

Equipos sin defensa

Si a nivel nacional la cosa tiende más a parecerse a un babel por los continuos despropósitos que a una Sanidad bien conducida, en lo que nos toca más de cerca con los mismos problemas, aunque con matices diferentes no le van a la zaga.

En nuestra residencia sanitaria no hay sector que este bien cubierto de medidas de protección para defenderse del ataque que este virus implacable. Si a los facultativos y enfermeras se les está racaneando material de protección, en los primeros eslabones de esa vital cadena la carencia roza máximos.

El equipo de recepción y reubicación de los aquí y ahora dudosos y en demasiados casos contagiosos enfermos que saturan las dependencias tienen que ir prácticamente a pelo, cuando sobre ellos recae el mayor riesgo de contagio. El gestor de estos recursos necesita retomar un orden lógico para que el equipo humano no se nos caiga.

Solo es necesario recordar y valorar la buena reflexión que alguien con buen criterio puso en curso. Hay que cuidar al cuidador, si no el fracaso esta garantizado, por ahí se empieza la casa.