No voy a poder perdonar nunca al PSOE por haber levantado a un muerto, y no me refiero a Franco, sino al nacionalismo radical de Vox.
El día 11 del 11 amanecí envuelto en una pesadilla (como todas las que parecen envolver a estos dos guarismos siniestros), me gustaría despertar de ella, pero todos los servicios informativos me dicen lo mismo, el radicalismo nacionalista ha llegado para comerse la democracia. Estamos despertando a los muertos y son nuestros hermanos, que se han radicalizado por los dos extremos; los fervientes y los que odian nuestra patria, y entre ellos se retroalimentan. Dios mío ¿es que no lo veis?; estáis poniendo las bases para una guerra, una confrontación entre hermanos en la que no tengo duda habrá victimas. PSOE y PP os lo pido de rodillas: tenéis todavía la llave, no la desperdiciéis otra vez, formar el pacto de gobierno necesario y ya no solo para mover el país hacia adelante, sino para dar un puñetazo en la mesa conjunto y así poner las libertades y la justicia en su sitio.
Sed consecuentes, aprended que una parte del pueblo que estaba callada ha encontrado una voz (Vox) y esta es un grito odioso de guerra que miente más que habla. Tened en cuenta que hoy podéis solucionarlo, pero mañana los ciudadanos os darán la espalda y os veréis como el partido de Rivera; echados a un lado por dar bandazos y no ser consecuentes.
PSOE y PP, os lo advierto, andad con tiento o en los próximos comicios os robaran la mitad de los asientos, y los españoles nos veremos obligados a envolvernos en banderas con anagramas añadidos. Tendremos que vernos señalando con el brazo en alto. Yo antes me los corto, antes los entierro, antes me muero, que vivir en la España irracional de otros tiempos.
