Adolfo Domínguez (Trives, 1950) es Premio Nacional de Diseñado de Moda 2019, tal y como anunció este viernes el Ministerio de Cultura que entrega este galardón, dotado con 30.000 euros. El jurado reconoce la "trayectoria profesional" del diseñador ourensano y "su significación en la historia contemporánea de la moda en España". El autor del famoso eslogan ochentero "La arruga es bella" y fiel a la filosofía de sostenibilidad en un mundo de fast fashion responde a este premio con una premisa: "Hay que seguir, que nada está hecho. Quiero estar activo, la jubilación es un concepto muy antiguo".
Hace unos meses que el diseñador protagonizó un Foro La Región en el que presentó su novela "Juan Griego" y confesó el papel de la escritura en los momentos más difíciles de la empresa, especialmente tras el incendio de la fábrica de San Cibrao en 1991. "Yo soy capaz de resistir lo que sea porque escribo. Es lo que me da energía", expresó. Precisamente hoy recoge en Plasencia otro galardón, el Pop Eye por su novela. De camino a este destino, conoció la noticia del Premio Nacional de Diseño de Moda. "Me siento muy agradecido", anota.
Empresa enraizada
En el Foro La Región también aseguró que la transición de la empresa "está hecha". "Mis hijas son la garantía de la empresa tras un desastre de cuatro años", explicó. Adriana, consejera delegada; Tiziana, al frente del diseño; y Valeria, en el área tecnológica; son la continuidad de una compañía enraizada en Ourense, cuna del textil. Adriana Domínguez posibilitó la reducción del 70% de las pérdidas de Adolfo Domínguez tras una etapa con una directiva externa que el diseñador califica de "nefasta". El discurso de las hijas es el de las raíces, las que defendió su padre para colocar Ourense en el mapa y ligar para siempre el nombre de la provincia a su empresa, cuya expansión internacional supone que hay 600 tiendas de Adolfo Domínguez en todo el mundo.
Expansión internacional
Adolfo Domínguez estudió Filosofía y Letras y fue bibliotecario durante la adolescencia. Entró en la moda en 1975, cuando empezó a confeccionar prendas masculinas. En París se interesó por la costura y estudió Bellas Artes y Cinematografía, conocimientos que trasladó a la moda posteriormente.
En su regreso a Ourense, Adolfo Domínguez empezó a confeccionar ropas ligeras y cómodas, diseñadas por él mismo, que vendía personalmente, recorriendo los pueblos gallegos en su coche. En 1983 nació la marca Adolfo Domínguez, que llegó a convertirse en la primera casa de moda de España en cotizar en Bolsa.
Este Premio Nacional de Diseño de Moda se suma a otros galardones como la Aguja de Oro en 1997, el Premio Telva de Moda en 2004 y el Lifetime Achievement in Fashion’de la Fashion Week de Miami, en 2006.
Sobriedad y libertad en una segunda piel
"Su eslogan histórico ‘la arruga es bella’ habla de su gusto por lo natural, destacando la sobriedad y libertad y su convencimiento de que la ropa es nuestra segunda piel. Ha tenido una importantísima expansión internacional, en el que se le reconoce su capacidad y sensibilidad para difundir el diseño y creación de moda española", destacó el jurado del Premio Nacional de Diseño de Moda sobre Adolfo Domínguez.
El jurado ha estado presidido por Román Fernández-Baca Casares, director general de Bellas Artes, y ha actuado como vicepresidenta Begoña Torres González, subdirectora general de Promoción de las Bellas Artes. El premio reconoce a un creador o a un colectivo susceptible de ser considerado como creador, por su obra hecha pública o realizada el año anterior. También como reconocimiento a una trayectoria.
