Una plataforma vecinal pide medidas preventivas y la Policía apunta a una reducción de accidentes
Un total de tres atropellos se han producido en menos de una semana en el casco urbano de Carballiño, lo que ha generado cierta alarma entre la población, al mismo tiempo que se especula sobre los motivos. Las tres víctimas tuvieron que recibir asistencia médica tras el accidente.
Dos de ellos se producían el pasado día 5, el primero en la avenida Compostela, a las 08,20 horas, y el segundo, a las 11,55, en Evaristo Vaamonde; mientras el tercero tenía lugar el día 7, a las 20,15 horas, en la avenida del Balneario.
La plataforma vecinal SOS Carballiño ha dirigido un escrito al Concello apuntando al "mal estado no que se atopan os pasos destinados ós peóns nesta vila (falta de iluminación, mala sinalización vertical, mal estado da sinalización horizontal, falta de badéns reductores de velocidade, etc)". Al mismo tiempo que plantean la adopción de varias medidas a corto plazo para reducir el riesgo como la mejora de la señalización, la instalación de dispositivos luminosos y de badenes reductores de la velocidad.
Además, a más largo plazo, consideran necesaria la realización "dun estudo para a detección das zonas máis críticas, coa finalidade de adoptar medidas especiais para mellorar a seguridade na mobilidade a pé, incluíndo a peatonalización de rúas e a redución da velocidade no casco urbano a 30 quilómetros por hora". También proponen la creación de "carrís bici-ecolóxicos que unan o centro urbano con instalacións como institutos, pazo dos deportes, piscina o parroquias limítrofes"; y campañas de concienciación "para reducir o uso de vehículos a motor de explosión e substituílos por medios de transporte máis respectuosos co medio ambiente e máis saudables".
Los tres atropellos de esta semana vienen a sumarse a otros cuatro que se produjeron el resto del año, coincidiendo en número con los ocurridos en todo el 2017.
El jefe de la Policía Local, Francisco Valeiras, declaraba que "os atropelos non son sempre unha consecuencia do estado das vías, xa que na maioría dos casos débense á falta de medidas de prevención por parte do conductor, do peón ou dos dous", y añade que "os pasos peonís dan preferencia pero non dan seguridade, o peón ten que asegurarse que o ven os condutores" Así, en relación a los tres accidentes de esta semana, considera que influyó en gran medida la falta de visibilidad provocada por el mal tiempo junto con el despiste del conductor. En los atestados, añade el cabo, que se recoge en uno de los casos el testimonio del conductor afirmando que tenía los cristales empañados; en otro caso se produjo el atropello cuando el coche daba marcha atrás saliendo del aparcamiento, una maniobra arriesgada, según los agentes, que recomiendan salir siempre hacia delante.
En lo que va de año se contabilizan un total de 86 accidentes de tráfico urbanos, de los que siete han sido atropellos, un porcentaje que Francisco Valeiras no considera alto, igual que el de 2017, que con 111 siniestros, también fueron siete atropellos. Valeiras destaca el importante descenso de accidentes debido a las medidas de seguridad que se tomaron. Al respecto, indicaba que en 2008 sucedieron 138 y al año siguiente 149, un número muy superior a los de estos últimos años, debido a que se establecieron sentidos únicos, se mejoró la señalización y se eliminaron obstáculos visuales en las intersecciones.
