Ribadavia cuenta con un nuevo gobierno integrado por los grupos del PSOE y Ribeiro en Común tras prosperar la moción de censura que defendieron en el pleno en el que el PP votaba en contra y el BNG se abstenía. Noelia Rodríguez recibía el bastón de mando de su predecesor, el "popular", César Fernández. Quedaba constituido así un nuevo equipo con Noelia Rodríguez en la Alcaldía, Paula Rodríguez de teniente alcalde, Brais Fidalgo, que asume la portavocía, Cristina Otero, Manuel Vázquez y Enrique Rodríguez, quedando fuera Ignacio Gómez, hasta ahora portavoz socialista, que se centrará en su labor como diputado.
Noelia Rodríguez comenzaba su nueva etapa con muestras de agradecimiento, entre otros, "aos profesionais sanitarios, compañeiros de profesión" y el reconocimiento al papel de las mujeres, "loitarei por lograr a igualdade real no Concello". Asimismo, indicó las líneas de acción del nuevo gobierno centradas en cuatro objetivos: aprobación de los presupuestos "basados no social" y en un plan de infraestructuras, obras y servicios; también en el refuerzo de los servicios sociales; un plan de dinamización con ayudas directas y ajustes de impuestos a los sectores con más dificultades por causa de la pandemia y el objetivo de convertir a Ribadavia en destino turístico. "O Concello debe ser axente dinamizador e xerador de recursos", matizó.
César Fernández, reprochaba en su intervención la "falta de recoñecemento que foi permanente nestes 20 meses de parte dos asinantes cara á totalidade dos membros do goberno municipal, baste lembrar cando se desprezaba o traballo da concelleira de Facenda dicindo que para dar unha opinión sobre os orzamentos precisaban escoitar ao alcalde". Fernández aseguraba que la moción de censura se fundamenta en lo absurdo cuando la idea de sus impulsores "non foi outra que a ausencia de orzamento para o ano 2021 a principios do mes de febreiro, cando ademais sabían que neste pleno ordinario de febreiro era cando o goberno iba a traer para a súa aprobación o documento orzamentario".
Ignacio Gómez recordaba a los "populares" el apoyo que recibieron por parte de la oposición, cuando "vostede despreciaba o traballo dos anteriores gobernos". El socialista recalcó que "a maioría deste pobo non o elexiu a vostede", y que "chegou a alcalde porque non fomos capaces de chegar a un acordo".
Brais Fidalgo apuntaba que el nuevo gobierno está abierto a la incorporación del BNG y que "non entendemos porque non se sumou", al mismo tiempo que reprochaba a César Fernández la falta de información y transparencia en lo relativo a la pandemia, y de "mentir" sobre proyectos inexistentes. Asimismo, anunciaba: "Vamos a facer todo o posible para que as liñas de axudas se apliquen o antes posible".
El secretario del PP de Ourense, Rosendo Fernández, salía posteriormente en defensa de la gestión de César Fernández que calificaba como "un labor encomiable cun goberno estable que facía moitos anos que non se vía neste concello", añadiendo que "estaremos expectantes para ver o que dá de se esta coalición que non foi quen de entenderse hai dous anos, pero que agora dá un paso sen sentido".
Muestras de apoyo en la praza maior para el exalcalde
En la Praza Maior de Ribadavia permanecieron algunos vecinos mientras duró la sesión, mostrando su apoyo a César Fernández. El BNG también hacía público un comunicado sobre su abstención, manifestando que "o BNG non se opón a que esa maioría chegue ao goberno municipal para o que queda de mandato, pero Ribadavia necesita un goberno plural, estable e con maioría para transformar Ribadavia desde o primeiro día e durante 4 anos".
