Alfonso Guerra participó en la creación de la Constitución de 1978, y durante su intervención en el Foro La Región de ayer dejó claro el importante paso que supuso para el país. "Es, sobre todo, un pacto de paz, después de dos siglos de lucha entre las dos Españas que decían", aseguró.
El sevillano recordó el consenso necesario para su elaboración, consenso que definió como "el listado de las renuncias que todos tuvieron que hacer para llegar a un acuerdo". Definió la Constitución como una "tabla de derechos" con peso suficiente frente a un tribunal judicial, una herramienta que ampara a los españoles, "a todos por igual".
La patria
Ante una de las preguntas del público, sobre el desuso de la palabra "patria" desde la izquierda, Guerra reconoció el miedo de los dirigentes. "Tienen un susto tremendo porque no vayan a llamarles fachas por defender a su país". Él no tuvo miedo a asegurar que se siente español, "cada día más", y que no dejará de defender su idea de país, uno en el que no hay odios, sino entendimiento, comprensión y solidaridad.
El político también habló del auge de la extrema derecha en toda Europa, y reclamó atención a los líderes democráticos. "Pensamos que es difícil romper la democracia, pero no lo es", aseguró.
El análisis del ex vicepresidente del gobierno
"La Constitución española es democrática, moderna, avanzada y solidaria, las voces que la critican no saben ni qué critican", sentenció Alfonso Guerra, exvicepresidente del Gobierno, durante su intervención en el Foro La Región de ayer. El Salón de Actos Marie Curie del edificio Politécnico del Campus acogió ayer a numerosos ourensanos que no se quisieron perder la oportunidad de escuchar el análisis del exdirigente socilaista del panorama político actual de España.
El sevillano dejó claro que entre el Congreso de hoy –"hecho un lío"– y el de antes -"del 'perverso' bipartidismo–, se queda con el del pasado. "El sistema ha degenerado, estamos en un caos; yo a los partidos les exijo un poco de sentido común", aseguró.
Durante su intervención, Alfonso Guerra ensalzó las figuras de la Transición y la Constitución, emblemas de la igualdad, el entendimiento y la unión de los españoles. Su nuevo libro, "La España en la que creo", recuerda el ejemplo de la convivencia política de 1978 –fue uno de los artífices de la Constitución–, base de la democracia actual, y llama a la reflexión a ciudadanos y políticos de diferentes ideologías. "La unidad no es otra cosa que la igualdad entre españoles", resaltó.
Francisco Vázquez, exalcalde de A Coruña, se encargó de presentar al invitado, no sin antes recordar al recientemente fallecido Manuel Soto Ferreiro, ourensano, exregidor de Vigo, y primer alcalde de la democracia de aquella ciudad, "un amigo y un compañero".
