El Concello de Baltar ha marcado la mínima gallega con una temperatura de -5.2 grados, según desprenden los datos emitidos por la estación meteorológica de la zona. A continuación, casi en una competición constante durante el invierno se situó el Concello de Calvos de Randín, que después de ser el protagonista en jornadas anteriores, se quedó esta vez en -4.9 grados.
Completaron los cuatro primeros puestos gallegos otras dos villas ourensanas, Verín y Xinzo de Limia, con -4.7 y -4.2 grados de temperatura.
En cuanto a la previsión del tiempo para este sábado, se esperan bancos de niebla hasta bien pasado el mediodía, dejando paso a cielos despejados y temperaturas que apenas superarán los diez grados de máxima. Las mínimas, en torno a los 0 grados. No se esperan precipitaciones ni el sábado ni el domingo, jornada en la que se disiparán las brumas y subirán ligeramente las temperaturas, tanto mínimas como máximas.
