La deshidratación en verano constituye un factor de riesgo para el organismo. El COFO impulsa la nueva iniciativa: "Cinco claves para la hidratación "para concienciar de la importancia de ingerir líquidos durante estos meses.
El agua es el principal componente del cuerpo humano, pero se pierde continuamente dependiendo de distintos factores como la edad o el calor. Representa entre el 50 y el 70% del peso corporal total y es un recurso natural imprescindible para el desarrollo de la vida.
Este año, el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmaceúticos de Ourense pone en marcha una nueva iniciativa al comienzo del verano con el objetivo de enseñar las pautas para conseguir una idónea hidratación en la ciudad, donde las temperaturas son las más altas de toda Galicia, según afirma el COFO.
La hidratación durante el verano es fundamental para prevenir síntomas adversos del calor y la sequedad ambiental. Así, el COFO inicia al comienzo de julio el proyecto "Cinco claves para la hidratación” con el objetivo de trasladar a la población la importancia de hidratarse e ingerir líquidos. Como mínimo, la organización recomienda beber entre 2 y 2,5 litros de líquidos incluyendo el agua que contienen los alimentos, sobre todo frutas y verduras, ya que además de retirar las sustancias de desecho y regular la temperatura corporal, transporta los nutrientes a las células y permite recuperar la pérdida de fluidos corporales.
Los niños, las mujeres embarazadas y las personas que realizan ejercicio físico están más expuestos a la deshidratación, por ello, estos grupos tendrían que prestar mayor atención a las cinco claves propuestas por el COFO.
Las recomendaciones que realizan los farmacéuticos de Ourense para tratan, en primer lugar, sobre la ingesta de agua sin esperar a tener sed, según Ricado de la Fuente, vocal de alimentación de la organización: " la sed es una señal que nos avisa de la posible falta de hidratación, no es saludable aguantar sin beber, al contrario, se debe beber sin esperar a tener sed", porque esto significaría déficit de agua interno que podría afectar al funcionamiento del organismo.
También aseguran que en las comidas es necesario mantener una adecuada hidratación con bebidas que contengan sales minerales por su alto contenido en sodio, en especial si hay síntomas como sed, sequedad de mucosas y de la piel o disminución de la cantidad de orina. Para aquellos que realizan ejercicio diario físico durante los meses de calor, el COFO aconseja hidratarse antes y después de la actividad y no entrenar en las horas centrales del día.
Las razones para hidratarse
Los beneficios de una hidratació correcta durante todo el año, y en especial en los meses estivales van más allá de incorporar líquidos al cuerpo. Evitar el dolor de cabeza y disminuir fiebres y vómitos son algunos de ellos. También la deshidratación afecta a los órganos principales como el riñon, hígado o estómago. En el caso del riñon, l orinar más, también se reducen las posibilidades de sufrir infecciones urinarias, y de que se formen arenillas en el riñón.
El agua lubrica mejor las articulaciones y mejora la resistencia de músculos y ligamentos, contribuyendo a mantener una musculatura tonificada.
En el cerebro, el agua constituye hasta un 85%, por lo que éste es especialmente sensible a los pequeños desequilibrios hídricos.
De esta manera, el Instituto de Agua y de Salud asegura que un descenso de tan sólo un 2% de agua en el cuerpo puede causar pérdida momentánea de memoria y disminución significativa de la atención.
La adecuada ingesta de agua favorece la absorción y disolución de nutrientes por parte de nuestro aparato digestivo, evitando así que se ralentice la función digestiva.
Para mantener la tensión arterial dentro de unos límites saludables es esencial una adecuada hidratación porque podría producirse un aumento de la tensión cardiaca proporcional a la magnitud de la deficiencia de agua.
No solo es imprescindible el consumo de líquidos, también lo es la calidad de estos , así Francisco Maraver, profesor titular de la Cátedra de Hidrología de la Universidad Complutense de Madrid asegura que "es muy importante que su consumo tenga asegurada la calidad y la cantidad adecuadas, especialmente cuando es conocida la influencia que el grado de hidratación puede tener sobre la salud y el bienestar".
