Indecente podría ser el calificativo con el que definamos el estado de algunas aceras de la ciudad de Ourense. En la avenida de Portugal, haciendo esquina con la calle de acceso al barrio de As Camelias, los peatones que van por la acera caminando tranquilamente tropiezan con los bordillos desiguales como el de la imagen, y terminan besando el asfalto. Por favor, ¿dónde van nuestros impuestos?... Ah! Sí... pianos en la calle... folklore, etcétera.