Cartelle recupera fuentes con la piedra de casas en ruinas

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Alumnos del taller de empleo Río Arnoia ejecutan las obras con el material cedido por el Concello

Ni el reciclaje es solo para los residuos domésticos ni la reutilización algo exclusivo de los ciudadanos. Al menos así lo entienden en Cartelle, cuyo Concello ha puesto en marcha una curiosa iniciativa para rehabilitar muros y elementos del patrimonio tradicional como fuentes y lavaderos utilizando la piedra de casas en ruinas. "Viches como queda?", preguntaba orgulloso el alcalde, Jaime Sousa, tras la última actuación en la fuente de Lama Grande, en la parroquia de San Miguel de Espinoso.

El alumnado del taller de empleo "Río Arnoia", que comparten los concellos de Cartelle, A Merca y Ramirás, ha sido el encargado de reparar, restaurar y colocar en el espacio del lavadero la piedra proporcionada por la administración local. "A idea é aproveitar a pedra das casas vellas. O material dunha casa dá para moito", explica Sousa, quien pone el acento en el doble beneficio de esta actuación porque "ademáis de recuperar o patrimonio con pedra tradicional, quitas un perigo da vía pública, como son as casas en ruínas dos pobos".

El trabajo para darle una nueva vida a la piedra "é costoso", reconoce el regidor, quien pone en valor la importancia de contar con los talleres de empleo "é unha forma de non ter que facer un investimento moi grande senón que, coa súa man de obra e o noso material reciclado, mantemos este patrimonio, que é a historia dos pobos, polo menos outros 25 anos". El resultado "é moito mellor e os veciños, en xeral, están moi contentos polo traballo feito nas fontes", señala José Peña, director del "obradoiro", que ensalza el valor que le dan los lugareños a todo lo que suponga mantener su patrimonio.


Herencias envenenadas


En esta ocasión, el Concello de Cartelle puso a disposición del taller de empleo la piedra que tenía acumulada de las obras de mejora del acceso a varios núcleos de población. Pero Sousa quiere ir más allá y anima a los propietarios de casas en estado de ruina a hacer lo mismo y reaprovechar este material para otras construcciones, o mismo regalarlo a quien lo necesite. "Ás veces son herdanzas envelenadas", apunta el regidor, quien advierte del alto coste económico que puede tener desarmar una vivienda y reciclar la piedra a través de los canales oficiales. "Entre maquinaria e demais, levar a pedra á planta de Leiro pode custar entre 8.000 e 12.000 euros", calcula.

La reutilización de materiales no es algo nuevo en el municipio. El actual alcalde hace años que practica este modelo de economía circular en las instalaciones privadas del centro hípico O Mundil, donde han creado desde un área de autocaravanas hasta un pequeño parque acuático reutilizando las traviesas de los trenes, los mojones de las carreteras o las viejas farolas sustituidas por las modernas lámparas de tecnología LED. En la era del "usar y tirar", Sousa deja caer que "non sería malo que dende arriba suxerisen o uso deste material", señalando a las administraciones superiores.

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