La hostelería ourensana volvió a salir a la calle en la tarde de este jueves, tras una semana de tregua, ante lo que consideran "medidas desproporcionadas" de la Xunta "sin ningún equilibrio", un día antes de que el subcomité clínico se reúna y que el Gobierno gallego active las nuevas ayudas para auxiliar al sector.
"Soluciones ya", reclamaron las cuatro asociaciones convocantes –Véxote nos Viños, Ahrou, Unión de Hosteleros y Cociña Ourense– tanto para el sector como para el tejido económico que lo rodea. "Hemos afrontado un gasto económico importante en el desembolso de productos higiénicos, sin que a día de hoy se nos haya compensado", advirtieron en la lectura del manifiesto, lamentando que "se nos ha señalado, criminalizado y, lo peor de todo, nos han matado a muchos sin igualdad con el resto de sectores".
El sector hostelero volvió a incidir en que la salud es lo primero, resaltando "que nos ayuden y nos dejen trabajar en condiciones". Agradecieron que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, dijera que la hostelería no es culpable, pero le recordaron con cánticos: "Alberto, queremos o bar aberto!"
En esa línea, los manifestantes exigieron "compensaciones" por estar cerrados, y que no se les dejan "a la deriva", porque, confesaron, "estamos hartos de buenas palabras".
Exigen tanto al Concello como a la Xunta ayudas "ágiles, directas e inmediatas", habida cuenta de que, ya que aunque no quieren vivir de ayudas, siguen afrontando todos los gastos y necesitan un "balón de oxígeno".
Entre los manifestantes, Luz Rosendo (Acio) mostró su desesperación y pidió "que nos dejen abrir nuestros negocios con unas condiciones, porque hemos intentado siempre hacer las cosas y nunca vino nadie a preocuparse por nada". Como todo el sector, señala que el verano "ya no fue bueno" y que se quedan sin recursos: ¿Cómo pago?"
La larga cola de manifestantes, que salió de la Praza Maior y acabó en la Alameda tras recorrer todo el centro, acabó con un mensaje de esperanza: "¡Nos vemos en los bares!"
