Emilio Cid Quintas “Milo”, alaricano aunque ligado desde hace años a Cartelle, es autor de un belén que fue en los últimos ocho años foco de atracción turística de esta última localidad durante las fechas navideñas. Trabaja como guardia de Seguridad en el Complexo Hospitalario de Ourense y reside en el barrio de O Couto. Precisamente esta última circunstancia ha ayudado a que se decida a trasladar este año su reconocido belén al populoso barrio, como le propuso hace semanas el presidente del centro Comercial Aberto Couto Centro, Tito Taín. Con esta finalidad, el CCA alquiló un bajo comercial vacío, situado en la calle Ervedelo frente al colegio Santo Ángel, que cumplía los requisitos de espacio y donde, además del belén, "pensamos desarrollar una serie de actividades para dinamizar el espacio comercial durante las fechas navideñas, todavía por concretar", avanza la gerente de la asociación, Mónica López.
El belén de Milo, que empezó poco a poco, con un nacimiento "pequeñito -en la casa familiar en Cartelle-, poco a poco fue aumentando y en este momento ocupa los 42 metros cuadrados", explica el belenista. Empezaba a finales de octubre a montarlo y se abría a las visitas con la llegada del puente de la Constitución. A verlo acudía "mucha gente de Vigo, Tui, Pontevedra…", señala. Y es que con el paso de los años se corrió la voz de que en Cartelle había un belén que merecía la pena trasladarse a ver. Un belén que nació con "una primera pieza que fue la recreación en poliestireno expandido (porexpán) del puente romano de Vilanova en Allariz. Entonces me dijeron que cómo estando en Cartelle ponía un puente de Allariz y no algo del pueblo, así que hice la iglesia parroquial de Mundil, en Outomuro". A estas piezas le seguirían otras recreaciones de monumentos emblemáticos de la provincia como As Burgas de Ourense, el Puente Nuevo de Freixo, el castillo de Sande… y este año, como gran novedad, "la iglesia de Fátima".
Figuras
El belén consta en la actualidad de "unas 250 o 260 figuras, y en cuanto a edificios, no sabría cuántos tengo en este momento", reconoce Milo, que hace hincapié en "la recreación del mundo egipcio, que siempre llama mucho la atención".
Una de las cosas que más trabajo le lleva "son las conexiones eléctricas, porque casi todas las casas llevan luz, hay muchos motores, para que gire el molino, para algunas de las figuras, que son articuladas,… Eso lleva bastante trabajo".
Otra de las características que destacará este año en el belén es que "se podrá girar en torno a él excepto en uno de los puntos; lleva más trabajo pero es más vistoso", señala.
Doce escenas bíblicas se pueden encontrar en este gran belén que su autor prevé tener listo para visitar en el puente de la Constitución.
