La provincia registró 41 contagios en la última jornada, un pico que rompe la tendencia a la baja de las últimas semanas. De los nuevos casos activos, 15 pertenecen a religiosas de la residencia estudiantil Santa Marina de la ciudad, regentada por el Instituto Calasancio Hijas de la Divina Pastora –este año, el centro no cuenta con estudiantes–. Nueve casos están relacionados con una vivienda comunitaria de Castrelo de Miño, y tres con la residencia de mayores San Antonio de Beariz (lo que eleva a 30 la cifra de usuarios contagiados).
El incremento de contagios eleva a 450 la cifra de casos activos de la provincia, 14 más que en la jornada del miércoles. El número de personas ingresadas se mantiene estable, con 40 hospitalizados en planta y 6 en la unidad de críticos.
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La tendencia a la baja continúa estabilizándose en la comunidad, que ayer volvía a reducir su cifra de casos activos a 7.419 (casi 500 menos que en la jornada anterior).
El escenario es similar al de los días pasados. Vigo es el área que más casos presenta, con 1.977 contagios; seguido de A Coruña, con 1.525; Pontevedra, con 1.106; Lugo, con 885; Santiago, con 825; Ferrol, con 651, y Ourense, con 450. La presión hospitalaria sigue reduciéndose, en la línea de las jornadas anteriores, con 414 personas hospitalizadas (una veintena menos que en días previos), de los que 65 se encuentran en la unidad de críticos.
Con respecto a los fallecidos, la Consellería de Sanidade informó ayer de 7 muertes (ninguno de ellos en la provincia ourensana). Esta cifra eleva a 1.235 el total de los óbitos registrados desde el inicio de la pandemia en la comunidad. En Ourense, el cómputo asciende a 294.
