El club podría desaparecer si no aparece relevo en la directiva
La última temporada acabó en pesadilla para un Verín que pasó de pelear por el ascenso a la Preferente Autonómica a no tener ni los jugadores suficientes para afrontar algún partido. Una situación lamentable en uno de los clubes con más historia en el fútbol provincial.
Santiago Cid Harguindey dejó la presidencia al final de la liga y ayer se hizo oficial en una Asamblea de socios que confirmó el delicado presente que vive el club. Pero sobre todo pronostica un futuro todavía más complicado. Cid Harguindey dejó el puesto libre para que otro presidente o grupo de aficionados asumiera el reto de liderar un nuevo proyecto. Y no se presentó nadie.
A día de hoy el Verín no saldría a competir la próxima temporada en la Primera Galicia y desaparecería.
El expresidente le comunicará la situación a la Federación Gallega y ahora se convocará una nueva Asamblea para que pueda aparecer un relevo. De no ser así el club no se inscribiría en la competición .