En Verín, los pequeños participaron de un particular chupinazo, al tiempo que en Amencer partían rumbo a Cambados y Allariz
No hay verano que se precie sin los oportunos campamentos para los más pequeños del hogar. En estos días, se multiplican por doquier las opciones. En Verín, sin ir más lejos, aprovecharon la sesión de la ludoteca estival de ayer en el colegio Princesa de España para acercarse un poco más a los festejos de la capital pamplonica.
Alrededor de un centenar de jóvenes entre los tres y los trece años participaron en las actividades programadas por el equipo de monitores, en la que les explicaron a los pequeños, entre otras cosas, la historia de la fiesta que en estos días inunda las calles de la ciudad de Pamplona. Además, los niños tuvieron la oportunidad de simular un chupinazo, aunque no tan sonoro y espectacular como el que se organiza en la plaza del ayuntamiento de Pamplona. Por si la representación resultase escasa, en la iniciativa de ayer también tuvo lugar un muy particular encierro, en el que el figurante taurino, en contra de lo que ocurre en la realidad, acabó huyendo despavorido del centenar de niños asistentes.
También los jóvenes de Amencer, pese a las tormentosas condiciones climatológicas de ayer tarde, iniciaron el segundo de los periodos de campamentos al aire libre. Un total de 57 participantes se dieron cita en las instalaciones de Salesianos para tomar dos rumbos, Cambados -30 jóvenes y 5 animadores-, y Allariz, con 18 mozos y 4 monitores. Todos regresarán al hogar el próximo 15 de julio.
Un total de 145 jóvenes, nacidos entre 2004 y 2012, participan en los campamentos de verano organizados por el Concello de Xinzo. Un total del veinte monitores atienden las distintas disciplinas, tanto deportivas como urbanas y de artes plásticas, y todos los días la jornada remata en las piscinas.
