Con una oferta de suelo industrial no ajustada a la demanda existente, la Federación Gallega de Empresas Inmobiliarias (Fegein) recuerda la necesidad de buscar soluciones para ocupar los más de 290.000 metros cuadrados de suelo disponible en los diferentes polígonos repartidos por la provincia, alertando el colectivo de la dura competencia a la que se enfrenta toda Galicia con la atracción que genera el norte de Portugal.
Apostar por la especialización de los parques empresariales, mejorar sus dotaciones y abaratar los precios figuran en la receta de las inmobiliarias para buscar soluciones a la situación actual, en la que el precio medio del metro cuadrado en las nueve áreas industriales de la provincia está en 61,98 euros.
Según los datos que maneja Fegein, la Central de Transportes tiene más de 80.000 metros cuadrados libres, la cifra más alta de Ourense, mientras que en Celanova son 3.274, la más baja.
Para el presidente de Fegein, Benito Iglesias, "deben darse todas las facilidades" a las empresas gallegas "para evitar su deslocalización al norte de Portugal". En esta línea, el inmobiliario propone que "el uso del suelo pueda ser aprovechado por las pequeñas y medianas empresas", animando a la Xunta a potenciar la fórmula del alquiler con opción de compra, algo que el conselleiro de Economía, Francisco Conde, explicaba a este diario que prácticamente no tiene aceptación en la Comunidad gallega.
"Iniciativas privadas han quedado en suspenso y paralizadas por la incertidumbre", destaca Iglesias, que prima la "necesidad de apostar por políticas que impulsen el sur de Galicia", captando empresas de "automoción, distribución o almacenamiento ahora en Portugal", algo que para Fegein sería un punto de inflexión en el desarrollo socioeconómico ourensano.
Fegein insiste en las posibilidades del Val da Rabeda
Más allá de los polígonos industriales, Fegein insiste en las posibilidades de desarrollo que ofrece el terreno del Val da Rabeda, que junto al parque de Paderne de Allariz suponen más de un millón de metros cuadrados, adquiridos en su momento por la Xunta tras desembolsar diez millones.
Entiende Benito Iglesias que la cercanía con la ciudad de Ourense, como ya sucede con el Polígono de San Cibrao facilitaría la "movilidad y el acceso a servicios". Entiende el inmobiliario que "tenemos el ejemplo del pulmón económico de la provincia", en referencia a San Cibrao.
