La petinesa Inés Siso Fernández cumplirá 100 años a principios de mayo, pero sus convecinos prefirieron no aguardar hasta la fecha y eligieron este viernes para tributarle un cariñoso homenaje, acto que sirvió para abrir la Festa da Freba, que va por su 20 edición. "Cando me cruzo con ela paseando, dígome que quixera ser como ela: traballadora, divertida, lle gustan os viaxes... Quixemos que ela sexa a protagonista", comentó Raquel Bautista Carballo, alcaldesa de Petín. Instantes después, entregaba un ramo de flores y una placa a la emocionada casi centenaria, quien apenas pudo decir: "Gracias. Estoy muy contenta".
Este reconocimiento a toda una vida precedió a la salida de los cocineros que atendieron a los 520 comensales que se sumaron a la fiesta gastronómica de Petín. Lo hicieron pausadamente, sin apurarse, y a las 14,30 horas, cuando deberían estar todos sentados a la mesa, apenas podía verse a una docena de personas bajo la carpa montada en el recinto del Teleclub. Media hora después, el recinto ofrecía una imagen bien distinta y los voluntarios de Protección Civil se esmeraban por facilitar el acceso.
Otros años, la fiesta consistía en una cena. Este viernes no. Los comensales saborearon la freba al mediodía. De preparar las parrillas y cocinar las 2.100 ofrecidas a los comensales se encargó la empresa valdeorresa Mantesil. Esta fue otra novedad, pues antes, cocineros y camareros eran voluntarios. Los asistentes también saborearon 225 kilos de patatas y 900 chorizos, no sin antes dar buena cuenta de los 200 litros de consomé.
