La Guardia Civil de tráfico interceptó a un conductor, de 52 años, cuando circulaba a 224 kilómetros por hora en la autovía A-52, a su paso por el municipio de Toén, en un tramo en el que la velocidad está limitada a 100 kilómetros/hora. El infractor conducía un Porsche en sentido Benavente.
Los agentes lo localizaron en la noche del pasado día 23 en el transcurso de un control y procedieron a tomarle declaración en calidad de investigado como presunto autor de un delito contra la seguridad vial al rebasar en más de 80 kilómetros la velocidad establecida. El conductor se enfrenta a penas de prisión y a la privación de conducir durante cuatro años. La Guardia Civil instaba ayer a los conductores a "no rebasar los límites de velocidad establecidos". Recuerda que "el riesgo de muerte y lesiones graves es mayor a velocidades elevadas".
