Trasmiras está ya definitivamente descartado como sede del centro experimental de aviones no tripulados. El municipio ourensano había quedado entre los finalistas en este proyecto, pero competía con el de Mazagón (Huelva), preferido por el Ministerio de Defensa. Incluso Fomento, que dirige el lucense José Blanco, analizó esta propuesta dentro del proyecto de reactivar el aeródromo de Rozas (Lugo). Al final, la opción seleccionada fue la onubense.
Así, el Consejo de Ministros autorizó ayer un convenio entre el Ministerio de Ciencia e Innovación, el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial 'Esteban Terradas', y la Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía para construir este centro, anexo al ya existente de El Arenosillo. La base estará dedicada a ensayos, entrenamiento y montaje de aviones no tripulados, para lo que dispondrá de una pista 2.500 metros de longitud y 45 metros de ancho, plataforma para estacionamiento y operación de aeronaves no tripuladas, torre de control, hangares, talleres y oficinas.
El proyecto, explica el Gobierno, supondrá la creación de 250 empleos directos, así como 500 indirectos. El Ministerio de Ciencia aportará 28 millones de euros en forma de anticipo reembolsable Feder.
El proyecto, explica el Gobierno, supondrá la creación de 250 empleos directos, así como 500 indirectos. El Ministerio de Ciencia aportará 28 millones de euros en forma de anticipo reembolsable Feder.
