Tras el frío, llagaron las borrascas. La provincia de Ourense se mantendrá hasta el domingo bajo la lluvia, especialmente el sur. Este miércoles se registraron hasta 73,3 litros de lluvia por metro cuadrado en el Xurés y en Baltar fueron 59,8. La ciudad también vivió una jornada de intensas precipitaciones y acumuló 12,9 litros por metro cuadrado. Algunos embalses, como el de Velle, ocuparon gran parte de su capacidad, que llegó a estar al 80,42%, que se evidenció en el río Miño a su paso por la ciudad. El de Frieira, en Padrenda, alcanzo el 81,03% de su espacio.
‘‘Llevábamos 15 días con un anticiclón que bloqueaba la llegada de borrascas, hasta el lunes, que se formó una de gran tamaño en el norte de Escocia, llamada Kristoff, y en sus límites se formaron otras pequeñas que nos están afectando", explica Juan Taboada. Estos frentes abrirán camino para que los próximos días continúen entrando nuevas borrascas y como resultado, llueva incesantemente lo que queda de semana.
"El miércoles aún estuvimos bajo la influencia de Gaetán, que trajo vientos de sur, inestabilidad y lluvias intermitentes que continuarán con intensidad por lo menos hasta el sábado", predice el coordinador de MeteoGalicia.
Una serie de desdichas
En Allariz, Protección Civil tuvo que intervenir en varias ocasiones para hacer frente a los contratiempos causados por la borrasca. Concretamente, en el lugar de O Arnado, en las proximidades de la piscina y la playa fluvial se cayó un árbol que los voluntarios procedieron a retirar. Fue más problemática la caída de otro ejemplar arbóreo en la carretera de Tosende, que llegó a afectar a la circulación y los efectivos de Protección Civil tuvieron que emplear motosierras para retirarlo de la calzada debido a las dimensiones de las ramas.
Por otro lado, Protección Civil requirió de la colaboración de los Bomberos de Xinzo de Limia para retirar una plancha de aluminio –de dos metros por 40 centímetros- que se había descolgado del Instituto de la villa, dado que representaba un peligro para viandantes y alumnos.
En Carballiño, las lluvias provocaron como es habitual la inundación del túnel de acceso a la zona de Corzos, por lo que el acceso desde la travesía de la N-541 fue precintado por la Policía Local, al igual que la calle Serra Martiñá. También se produjeron desbordamientos en los registros del alcantarillado en las avenidas Compostela, Arenteiro y Balneario a lo largo de la mañana de ayer.
En el este de la provincia, la borrasca que castigó la provincia en la últimas horas obligó a los integrantes del Grupo de Emerxencias Supramunicipal (GES) de O Barco a realizar dos salidas. Una de ellas tuvo por objeto librar una calle de las afueras del Viloira, a causa de los desprendimientos de un talud. En la segunda, procedieron a la retirada de un árbol que el viento derribó sobre la carretera de Alixo.
En el caso de Terra de Celanova, los bomberos de la Mancomunidad tuvieron relacionada con una caída de un árbol en la calle Francisco González Rey. El ejemplar, que estaba en una finca privada, se cayó hacia la calle derribando parte del muro de cierre de la finca.
