El Obispado cederá rectorales y dos empresas harán contratos comerciales con los beneficiados
A falta de unos flecos, un proyecto pionero en Europa a nivel de integración de refugiados verá la luz a principios de mayo en la provincia de Ourense. El Obispado cederá casas rectorales vacías, sobre todo aquellas con terrenos en sus alrededores, para que las personas refugiadas puedan vivir, mientras la Asociación de Cerveceros, Cervezas Pardao y la empresa Lago, Aves, Huevos y Caza, se les facilitará trabajo en las propias parcelas para el cultivo de productos para la elaboración de cerveza y la cría de pollos de corral.
Daniel Argiz, representante del Obispado; Quino Muñoz, en representación de Cervezas Pardao, y Álvaro Goyanes, de la Asociación de Cerveceros, se reunieron ayer en Madrid con miembros de Arquitectura sin Fronteras, la Red Estatal de Desarrollo Rural (REDER), la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), la oenegé ACCEM, la Fundación CEPAIM, y representantes de la Dirección General de Migraciones.
Con el proyecto, se van a rehabilitar casas rectorales que el Obispado cederá para la instalación de los refugiados. A su vez, Pardao firmará contratos con estas personas para la comercialización de lúpulo y cebada que plantarán en los propios terrenos de las rectorales para la fabricación de sus cervezas.
Para ello, tanto la compañía Pardao como la Asociación de Cerveceiros realizará una campaña de tutelación sobre la comercialización de lúpulo y cebada para que los beneficiados adquieran los conocimientos suficientes para poder desarrollar la actividad. Por su parte, Lago, Aves, Huevos y Caza hará lo propio con la comercialización de gallos de corral.
El objetivo de esta iniciativa de carácter social es que "las personas refugiadas se acaben desligando de las entidades que los tutelarán en un inicio", siendo completamente autónomos, según informaron fuentes del proyecto.
Presentación oficial
A lo largo del mes de mayo, tanto el Obispado como las entidades colaboradoras presentarán el proyecto a la sociedad y a los alcaldes de los concellos donde se situarán las rectorales seleccionadas para poner en marcha el proyecto.
Los alcaldes serán llamados en las próximas semanas desde la Secretaría General de Inmigración, dependiente del Ministerio de Empleo y Seguridad Social, para informarlos sobre las características de un proyecto cuyos promotores destacan como "único" en el plano social europeo.
El Obispado tiene alrededor de medio millar de rectorales en la provincia, de las cuales solo 120 están ocupadas en la actualidad. Por tanto, cerca de cuatro centenares de ellas están libres, aunque gran parte de ellas necesita una rehabilitación integral para su uso.
