La Xunta puso ayer en marcha un procedimiento para ejecutar obras de conservación y mejora en la sacristía de la Catedral de Ourense, una actuación para la que reserva algo más de 70.000 euros y que pretende adjudicar en pocas semanas, estableciéndose un plazo de ejecución de cuatro meses.
En la memoria de los trabajos, se deja claro que no existen problemas estructurales en el departamento, pero sí se recomiendan "actuacións de conservación para protexer o espazo". Así, la obra en la sacristía consistirá en mejorar el pavimento y los muebles o la limpieza de la piedra, mostrando algunas pinturas desprendimientos.
Lo más urgente es, sin embargo, solucionar la desaparición de elementos decorativos o tallas, arreglar diferentes bandejas que no se pueden accionar o el deterioro del barnizado.
Con este proyecto se pretende también mejorar la iluminación, "moi precaria nestes momentos" –recoge el proyecto–, por lo que se actuará tanto en la lámpara de las dependencias como en el acceso a las mismas, colocándose luminarias Led modernas.
Esta nueva mejora en la Catedral se sumará a las ya acometidas en los últimos años para restaurar el interior del templo o también la fachada norte, muy castigados por el paso del tiempo.
