La adjudicataria firmó el contrato en enero y, tras dos meses de retraso, la reforma de las instalaciones entra en su última fase
Las instalaciones del matadero de Carballiño estará en marcha para la tercera o cuarta semana del mes de septiembre, según declaró Emilio Pedro González, representante y socio de la entidad. Las obras siguen su curso, entrando en el tramo final, lo que permite a la adjudicataria asegurar que la inauguración de este servicio se realizará "de forma inminente".
El proyecto técnico se efectuó sobre los 1.600 metros construidos de la anterior nave, que quedó inoperativa en 2012 a causa de una explosión en la caldera. El presupuesto que se destinó superaba los 1.100.000 euros, financiados por la empresa adjudicataria. La obra se estructuró en dos fases: la primera de ellas, a punto de finalizar, consistió en la reparación completa de la zona de trabajo, permitiendo que comience a funcionar mientras se realiza la segunda fase, que supone la construcción de cinco muelles de carga y cuadras en la parte posterior. Las actuaciones respetaron el proyecto original casi en su totalidad, salvando la ampliación de la zona de tratamiento de ganado de sacrificio.
"Nos falta muy poquito, las únicas dificultades que tenemos son externas", explicó González. Los detalles que todavía están pendientes son un problema con la suministración del sistema eléctrico, que si no consiguen solucionar les obligará a alquilar un generador industrial. Otro de los inconvenientes es la maleza de los montes colindantes con la nave. La ley obliga a que los 15 metros de alrededor estén totalmente limpios. El Concello se está poniendo en contacto con los propietarios para solucionarlo en la mayor brevedad posible. "Eso sí que nos dificulta el trabajo. Ponemos la depuradora todos los días y no sirve para nada", argumentó el representante de la entidad.
Con esta reapertura, el matadero dará un impulso económico a la comarca derivado de la contratación de nuevo personal y con la recuperación del potencial cárnico de antaño. Los socios de la adjudicataria señalan la buena acogida que recibieron en el municipio. "Venimos para Carballiño como unos vecinos más", comentó González, que destacó también la "facilidad y rapidez" con la que el Concello soluciona los proyectos. "Se muestran ilusionados y preocupados, y eso cala en los empresarios y atrae la industria aquí", argumentó el empresario.
