Se preveía un partido igualado y así fue. La ida de la Copa Galicia de fútbol sala femenino disputado en A Seca entre Poio y Envialia terminó con empate sin goles. Mejor el conjunto ourensano en el juego de cuatro y sin dueño el duelo cuando el Poio trataba de dar una velocidad desmedida al encuentro.
Sara Santos pudo dar ventaja al equipo de Gonzalo Iglesias "Morenín" en una acción en la que después de superar a la portera local remató mal. Ella también fue una de las protagonistas de la acción que pudo marcar el partido. Escapada de la brasileña por la banda que fue cortada en falta por la meta Silvia Aguete. La acción fue reclamada como roja,pero los árbitros solo sacaron amarilla a la internacional española, que además tuvo que ser trasladada en ambulancia a un centro médico, al llevar un fuerte golpe en la cabeza y sufrir un mareo en la jugada.
Otra gran ocasión para el Envialia la tuvo Laura Uña, pero su intento de vaselina se marchó fuera.
"Dentro de la igualdad del partido fuimos mejores, porque tuvimos mucho más el balón. Es cierto que en su correcalles ellas se sintieron más cómodas, pero en cuanto a juego estuvimos mejor que ellas", subrayó Morenín.
"Fue un partido de ritmo en el que logramos sacarle el balón a Poio, lo que nos permitió tener un mayor control. No fue un partido de empate a cero", finalizó Morenín. La vuelta decidirá en marzo.
Mucho Burela ante Amarelle
El Burela se paseó en el primer envite de la otra semifinal, al imponerse al Amarelle de Segunda División por 1 a 10. Dobletes en el equipo lucense para Cilene, Lara Balseiro, Jenny Lores y Ale de Paz, a los que añadir el gol de Peque y otro de María en propia meta. Ocho minutos tardó en encarrilar la eliminatoria el Burela, al anotar tres goles, y otros tantos para cerrar el primer tiempo con 0-6. En la segunda mitad la ventaja no dejó de crecer, hasta el 0-10 que reflejaba el marcador en el minuto 33.
