La primera victoria del Ourense CF se hizo de rogar, pero llegó y de una manera contundente. Remontó el tanto inicial del Estradense al que acabó goleando por un contundente 4-1 que le posibilita abandonar la última posición en la clasificación del Grupo B.
El cuadro visitante quiso tomar el mando y para eso presionó bien arriba, ahogándole la salida a su rival que, en ese primer cuarto de hora le costaba encontrar el balón.
Sin embargo pasó un ligero susto el Estradense en un balón envenenado en el primer palo que logró desviar Cascallar. Lo intentó más tarde Víctor Sanchís, pero su zurdazo se marchó desviado.
Sólo la personalidad de Tafa le aportaba cierta tranquilidad a sus compañeros de defensa, llegando siempre a todos los cierres y anticipándose con gran sobriedad.
El Estradense se mostraba más convencido de ir a por el gol, al punto que en una internada por la banda de Mateo Mariño estuvo a punto de marcar en un mano a mano con el portero que logró desviar a saque de esquina.
La presión visitante finalmente daría sus frutos al cortar la salida defensiva de los pontinos que la aprovechó Brais Calvo para sacudir la red con un espectacular zurdazo que superó la estirada de Sergio. Era el 0-1 y era justo.
El Ourense CF despertó ante el tanto encajado y su reacción en forma de contragolpe comenzó a tener presencia con un inquietante Wadir y las subidas por la banda del capitán Willian.
Entrando al cuarto y último minuto que añadió el árbitro, se produjo la jugada que iba a cambiar el rumbo del partido. Martín Vilar, sumado al ataque y dentro del área no aprovechó una nítida posibilidad para aumentar la renta del Estradense. Esto derivó en la fulminante contra de Wadir, que fue frenado con falta cuando estaba a punto de internarse al área por la banda izquierda. Cassano colgó la falta y Wadir entrando por el segundo palo resolvió con un potente cabezazo que sirvió para empatar (1-1) e irse al descanso más reforzado y ahuyentando las dudas de un complicado primer tiempo.
Sin duda que el gol anotado por los locales al cierre del primer acto fue como un inyección de moral que le dio nuevos aires para encarar la segunda parte.
La fórmula de la acción a balón parado volvió a ser decisivo para los locales. Cassano, un verdadero especialista, lanzó la falta desde la izquierda para que Tafa peinara el balón dejando descolocando a Cascallar y poner el 2-1.
El Estradense había perdido el juego combinativo, la medular fue propiedad de Jerín, que comenzó a distribuir el juego y la presencia de Borja Domingo y Wadir se hizo más patente en el área rival.
Precisamente esta pareja de atacantes terminarían por darle el golpe de gracia y certificar el primer triunfo en la era del entrenador Rubén Domínguez.
Borja Domingo robó con gran decisión un balón en tres cuartos de campo, se fue por la banda izquierda, levantó la cabeza y metió una buena asistencia para que Wadir con frialdad definiese entre las piernas del portero estableciendo el 3-1.
La guinda de Borja Domingo
El Estradense quedó mal herido, pero aún así con mucha vergüenza deportiva lo intentó, pero Sergio apareció para desviar al córner un tiro raso de Juanín.
La última línea visitante arriesgó más de la cuenta y lo terminó pagando con el 4-1. Borja Domingo la robó el balón a su marcador y tras recortar la salida de Cascallar, y desde un ángulo muy escorado, tuvo la suficiente precisión para mandar la pelota al fondo de la red y sentenciar el encuentro.
El Ourense CF vuelve a sonreír, enmendó fallos, se levantó a tiempo y respondió con certeza.
