En los últimos días, políticos de diferentes comunidades autónomas están dictaminando diferentes restricciones para las fiestas navideñas. Unas medidas que cada día que pasa se están relajando más, especialmente en el apartado de las reuniones familiares: primero parecía que podríamos ser máximo seis en casa, luego se pasó a diez y ahora parece que en algunos lugares podrán ser diez sin contar los menores de edad, por lo que esa cifra se podría duplicar sin problema.
Tengo a varios conocidos que ya están haciendo sus particulares clases de matemáticas intentando hacer cábalas para meter a toda la familia en las comidas o cenas que vayan haciendo durante estas fechas tan señaladas en nuestros calendarios. Mientras tanto, muchas personas nos están dejando debido a que seguimos en una pandemia que ni mucho menos ha desaparecido, es más, parece que estará con nosotros unos cuantos meses más, siendo optimistas.
Si no queremos que las cifras se vuelvan a disparar, creo que lo mejor sería que las reuniones familiares, comidas, cenas, etc, se hagan con las personas que conviven habitualmente en el domicilio, pues así el riesgo sería mínimo. Ahora que las cifras son más positivas y ya se vislumbra una posible vacuna en el horizonte, cabe decir que seguimos inmersos en una pandemia y que esta no desaparecerá en las próximas semanas.
