Lleva desde el 2014 dirigiendo el timón de la Audiencia Provincial de Ourense y el Consejo General del Poder Judicial le acaba de encomendar, tras estar casi un año en funciones, que continúe otros cinco años en el cargo. Este magistrado está curtido en la carrera judicial, que comenzó a finales de los noventa en Carballiño. Más tarde sirvió en otro Juzgado mixto, el número 1 de Lugo, del que saltó al Juzgado de Instrucción 2 de Ourense. Conoce perfectamente a la sociedad ourensana y es miembro de la Sala de Gobierno del TSXG y de la Red Judicial Española. Su reelección fue por abrumadora mayoría, dado que obtuvo 19 de los 21 votos del pleno. Otros dos votaron en blanco.
La reelección costó. Lleva casi un año en funciones ¿Satisfecho?
Sí, mucho. Reconozco que la elección fue un proceso largo -fue retirada en varias ocasiones del orden del día del pleno del CGPJ-, pero al final se abordó el asunto y claro que estoy satisfecho con la reelección por otros cinco años.
¿Y ya tiene planes de trabajo?
Vivimos tiempos complicados, pero hay que intentar dar respuestas a los ciudadanos. Vamos recuperar medidas que ya se habían adaptado como la comisión provincial de violencia de género para dar mayor protección a las mujeres frente a la violencia machista. Es un tema que nos preocupa y hay que dar soluciones a las mujeres que sufren malos tratos. También vamos a trabajar para humanizar la justicia, que sea un servicio útil y próximo al ciudadano. Este último es uno de los principales objetivos.
¿Está influyendo mucho la actual situación sanitaria en la justicia ourensana?
No estamos detectando un aumento sustancial en el número de asustos judiciales, pero la paralización de muchos negocios y empresas a causa de las medidas para evitar los contagios pueden aumentar el número de asuntos, sobre todo en el Juzgado Mercantil. En los próximos meses, esperaron un aumento en el número de asuntos que llegan a los juzgados.
¿Hay suficientes medios para impartir justicia en Ourense?
Siempre son necesarios más recursos. Estamos en un proceso de digitalización para facilitar el teletrabajo. La conversión digital nos está facilitando mucho la labor en comparación con lo que teníamos antes. Sería necesario crear una plaza más en la Sección de lo Civil y un juzgado más de primera instancia. La Xunta puso en marcha proyectos de modernización y en la práctica se avanzó mucho y esperamos continuar progresando para tener unas instalaciones -juzgados- y realizar un trabajo decente, como se merece la ciudadanía.
Como magistrado y como presidente de la Audiencia, ¿qué es lo que más le impacta en su trabajo cotidiano?
Las agresiones sexuales me producen repulsa. Lo paso bastante mal al sentarme para dirimir una agresión sexual. Hay otro tema que me afecta, al juzgar a personas que sufren enfermedades mentales y precisan un internamiento en un centro especializado y adecuado a su dolencia. No es fácil cuando uno se enfrenta a un caso de estos y reconozco que me afecta mucho personalmente.
