Los vendedores de productos de alimentación y horticultura serán los primeros en colocar sus puestos en la feria de Viana do Bolo, una vez suspendida la prohibición que el alcalde, Secundino Fernández Fernández, decretó el 26 de mayo pasado, debido a la crisis sanitaria del covid-19. "É ir empezando a recuperación", comentó el regidor. Añadió que las pulpeiras también podrán colocarse en el recinto ferial.
En todo caso, la feria abrirá con importantes restricciones respecto al periodo anterior a la pandemia. "O número de postos autorizados limitarase ó 30% dos habituais", dice la información que distribuyó el Concello. Esta limitación del aforo deberá ir acompañada con la distancia de protección que estableció la autoridad sanitaria: "Os postos deberán sinalar de xeito claro a distancia de seguridade interpersoal de dous metros entre clientes", continúa el anunció.
Las marcas deberán estar delimitadas mediante balizas, cartelería o señalización, en aquellos casos en los cuales los vendedores puedan ofrecer una atención individualizada a más de un cliente. También serán dos metros los que separarán dos puestos, que únicamente podrán montarse a un lado de la calle. Además, será obligatorio acudir a la feria provisto de máscara protectora, bien de tipo higiénico, bien quirúrgica.
El alcalde, Secundino Fernández, indicó que únicamente podrá haber puestos de alimentación y horticultura por considerarlos "prioritarios". Añadió que "o resto no cabía".
