El conselleiro de Medio Rural, José González, concretó en el Parlamento que la última ola de incendios acumuló 67 fuegos, de los que 22 empezaron de noche, cuando no podían actuar medios aéreos. Una docena se produjo en parroquias de alta actividad incendiaria. El conselleiro subrayó que esto pone en evidencia la intencionalidad:"Hablamos de una cuestión de orden público, de delitos incendiarios que ponen en peligro vidas de personas". Agradeció la labor de los agentes, que permitió detener cuatro personas, tres in situ, y recordó que este año van 50, para después trasladar a los incendiarios que "más pronto que tarde responderán con penas de cárcel y pagarán con su patrimonio".
Xosé Luís Rivas (BNG) advirtió que, pese a la "sobada cantinela" de los fuegos intencionados y de los "terroristas" incendiarios, el "problema" reside en el "abandono" y las "culpables" son las políticas de "destrucción del rural" del PP: "Llevamos 12 años perdidos con Feijóo que marcan el fomento del abandono. Y Ourense siempre está ahí, con el caciquismo del PP. El pueblo de Ourense no es incendiario, lo que hay es un grito de atención".
