El Arqueolóxico inauguró la muestra "Alicerces", que marca la evolución desde el siglo XVI
¿Sabe usted que la actualmente llamada Praza de Santa Eufemia antiguamente era una calle que no medía más de dos metros de ancho? ¿Se puede imaginar cómo era la Porta de Aira, próxima al Xardín do Posío? ¿Qué aspecto presentarían actualmente As Burgas con el Gran Hotel Balneario al frente, si éste se hubiese construido? "Alicerces", la exposición que ayer inauguró el Museo Arqueolóxico de Ourense en la sala de exposiciones Afundación, y que permanecerá abierta hasta el 28 de febrero, ofrece estas y otras muchas respuestas para dar una visión comprensible y llena de datos del cómo y por qué de la evolución urbana de Ourense desde el siglo XVI al XX.
"La muestra surge como continuación de la que llevamos a cabo en el año 2008, bajo el título de "A Cidade, da orixe ao século XVI", y que gustó mucho. Es un tema muy atractivo y que a nivel expositivo no se había trabajado", explica el director del Museo Arqueolóxico, Xulio Rodríguez.
Añade que "esta exposición ofrece al visitante piezas arqueológicas, algunas de ellas que nunca habían sido expuestas anteriormente, propiedad del Museo, y documentos muy interesantes de varios archivos". Así, el visitante podrá descubrir cómo era la ciudad en el XVI y cómo ha ido evolucionando hasta casi la actualidad. Como complemento se ofrecen una serie de reconstrucciones en tres dimensiones, así como un pequeño vídeo, que facilitan la compresión de esos cambios producidos en la ciudad.
"La muestra hace un recorrido por la importancia del agua, por la evolución de las estaciones de tren que fueron conformando la estructura de la ciudad, por su ocio, por las viviendas; es decir, es una exposición muy completa a través de nada menos que cinco siglos", según Avelino Rodríguez, técnico del Museo. Los ourensanos descubrirán así como sus actuales principales arterias fueron las carreteras que comunicaban la ciudad con Castilla, Portugal, Trives o Vigo. El paso del poder de la nobleza al de la burguesía trajo también consigo cambios para la ciudad, al apostar por el ocio, como por ejemplo la creación del jardín del Posío. Todo ello queda perfectamente documentado y reflejado en las dos plantas de la sala de exposiciones. Como curiosidades, el boceto de la lápida de la famosa "Pobre Asunción" o un dibujo de cómo eran las casas en la calle das Tendas, que nunca ha sido expuesto, y que aparece en la documentación de un litigio entre vecinos.
