Fútbol

Todavía queda mucha liga

Josu, de la UD Ourense.
photo_camera Josu, de la UD Ourense.
Algunos clubes ya tienen que empezar a reaccionar si quieren evitar una temporada larga y dura de digerir

Aún queda mucha liga. Cierto. Tanto como que es casi una frase hecha y el recurso sencillo para evitar análisis más profundos.  

Válido cuando se está cerca o en dinámica de aproximarse a los retos marcados durante la pretemporada pero irrisorio cuando no hay otro calificativo más acertado que decepcionante. Que quede mucha liga solo sirve para pensar que hay tiempo para corregir los errores, pero todo empieza por asumirlo y tratar de ponerles remedio.

Imposible garantizar la presencia del Ourense CF en la promoción de ascenso o que el Arnoia logrará la permanencia con holgura, pero los dos van camino de conseguirlo. También cumplen o incluso mejorar los guiones previstos Barco, Arenteiro o Velle. Hasta el Polígono podría estar dentro de la lógica, por desgracia.

Los que preocupan son UD Ourense o Barbadás. Por muchas excusas que se quieran poner, entre estar cerca de los mejores o los peores hay demasiada diferencia. A ninguno de los dos se le puede exigir el ascenso o la promoción, pero tampoco se les puede aceptar el estar tan abajo. En el caso de los rojillos solo con un punto de ventaja sobre el descenso. Tan mala es la euforia como la ausencia de crítica. Por suerte todavía queda mucha liga.

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