Los novios ourensanos que deciden formalizar su relación mediante una unión de hecho no dejan de aumentar en la provincia. No en vano, el Registro de Parejas de Hecho de Galicia cerró el pasado año con 377 emparejamientos de estas características sólo en Ourense, un 37,59% más que las que se contabilizaron en el año anterior (274), según los últimos datos de los que dispone la Consellería de Presidencia, Administracións Públicas e Xustiza, el departamento de la Xunta que coordina este censo -el único que oficializa este tipo de uniones-.
La tendencia al incremento en el número de parejas que deciden formalizar su noviazgo mediante un emparejamiento de hecho, es contraria al de las que deciden hacerlo mediante un enlace matrimonial, ya que, aunque sigue siendo esta última opción la mayoritaria, cada vez hay menos prometidos en la provincia dispuestos a sellar su compromiso mediante una boda (civil o religiosa).
Precisamente, en lo referente a los enlaces celebrados ante el altar, la Diócesis de Ourense tramitó en 2011 un total de 565 expedientes de uniones religiosas, 33 menos que las que contabilizó el año inmediatamente anterior (598). Fuentes del Obispado consultadas precisaron que, aunque el descenso es patente con respecto a décadas atrás, no todos los años se produce una dismunición acumulada en el número de parejas que se casan en una iglesia. Asimismo, matizaron, además, que no todo este volumen de enlaces religiosos se celebró en la diócesis ya que, aseguraron, 'hai expedientes de parellas que se casan aquí e realizan os trámites fóra e viceversa'.
No obstante, cifras distintas son las que maneja el Instituto Galego de Estatística (IGE), que constatan una disminución en el número de parejas que formalizaron su relación, tanto por lo civil como por lo religioso, desde 2008 hasta 2010, el último año del que, a día de hoy, hay registros publicados. Mientras que en el primero, se contabilizaron 579 enlaces en una casa consistorial y 480 ante un sacerdote, la merma de novios que deciden casarse han hecho disminuir estes números de forma progresiva y acumulada hasta las 389 bodas católicas y las 454 civiles de 2010.
Tendencia contraria es la que se da entre quienes optan por una unión de hecho, una fórmula que, en la práctica, según Victoria Eugenia Diéguez, abogada especialista en Derecho de Familia, 'equipara los derechos en materia de sucesiones y de régimen económico-patrimonial, al de un enlace de tipo civil'. En la práctica, por tanto, quienes formalizan su relación mediante un emparejamiento de hecho, 'tienen casi, los mismos derechos en cuanto a la sociedad de gananciales y herencias que quienes se casan por lo civil', siempre que están anotados en el registro autonómico, no en los censos de carácter municipal.
Desde que se puso en marcha el Registro de Parejas de Hecho de Galicia, en enero de 2008, el montante total de emparejamientos de estas características inscritos en el mismo supera ya los 625 en la provincia (los que contabilizó la Administración autonómica a mediados de 2011).
Precisamente, en lo referente a los enlaces celebrados ante el altar, la Diócesis de Ourense tramitó en 2011 un total de 565 expedientes de uniones religiosas, 33 menos que las que contabilizó el año inmediatamente anterior (598). Fuentes del Obispado consultadas precisaron que, aunque el descenso es patente con respecto a décadas atrás, no todos los años se produce una dismunición acumulada en el número de parejas que se casan en una iglesia. Asimismo, matizaron, además, que no todo este volumen de enlaces religiosos se celebró en la diócesis ya que, aseguraron, 'hai expedientes de parellas que se casan aquí e realizan os trámites fóra e viceversa'.
No obstante, cifras distintas son las que maneja el Instituto Galego de Estatística (IGE), que constatan una disminución en el número de parejas que formalizaron su relación, tanto por lo civil como por lo religioso, desde 2008 hasta 2010, el último año del que, a día de hoy, hay registros publicados. Mientras que en el primero, se contabilizaron 579 enlaces en una casa consistorial y 480 ante un sacerdote, la merma de novios que deciden casarse han hecho disminuir estes números de forma progresiva y acumulada hasta las 389 bodas católicas y las 454 civiles de 2010.
Tendencia contraria es la que se da entre quienes optan por una unión de hecho, una fórmula que, en la práctica, según Victoria Eugenia Diéguez, abogada especialista en Derecho de Familia, 'equipara los derechos en materia de sucesiones y de régimen económico-patrimonial, al de un enlace de tipo civil'. En la práctica, por tanto, quienes formalizan su relación mediante un emparejamiento de hecho, 'tienen casi, los mismos derechos en cuanto a la sociedad de gananciales y herencias que quienes se casan por lo civil', siempre que están anotados en el registro autonómico, no en los censos de carácter municipal.
Desde que se puso en marcha el Registro de Parejas de Hecho de Galicia, en enero de 2008, el montante total de emparejamientos de estas características inscritos en el mismo supera ya los 625 en la provincia (los que contabilizó la Administración autonómica a mediados de 2011).
