Valdeorras

Vecinos de O Barco reclaman una solución a los apagones

02122020_calle_afectada_apagones_resultado
photo_camera Una de las calles afectadas por los apagones del alumbrado público.
El Concello confía en que Naturgy arreglase la avería que provocó fallos en el alumbrado público 

Un sector vecinal de O Barco mostró este miércoles su malestar por los repetidos fallos del alumbrado público que afronta desde hace prácticamente una semana. El barrio afectado incluye un tramo de la avenida del Bierzo y las calles A Veiguiña, Soto de Yáñez, La Ribera y A Carrúa. A partir de las 20,00 horas, las farolas dejan de alumbrar.

"Es una vergüenza. Puede haber robos y es un peligro para los peatones", afirmó uno de los afectados. Explicó que, a veces, la iluminación regresa a estas calles, añadiendo que apenas dura unos minutos antes de volver a fallar.

El alcalde, Alfredo García Rodríguez, mostró ayer tarde su confianza en que el problema hubiese sido solucionado, que pretendía confirmar al llegar la noche. Eso sí, antes tuvo que dirigirse al responsable de Naturgy en Galicia. Pero no todo parecía haber cambiado en la zona a las 20,00 horas, pues aún había lugares sin iluminación.

Momentos antes del encendido del alumbrado público, el regidor explicó que los fallos son consecuencia de la instalación de los nuevos contadores inteligentes. La potencia contratada de alguno de los cuadros estaba muy ajustada al consumo, por lo que cualquier aumento provocaba los apagones.

Con miras a poner fin a estos fallos, el Concello pensó en aumentar la potencia contratada. Sin embargo, no pudo ser. La lentitud de los trámites demoraba en exceso la solución, pasando los técnicos a  un "plan B", consistente en la colocación de maxímetros, aparatos que no saltan aunque el consumo de electricidad supere al contratado. Pero también aquí los tediosos trámites impidieron su aplicación.

Al fallar las dos soluciones manejadas, Alfredo García se puso en contacto con el delegado gallego de Naturgy. "Nos da igual la solución que nos dé. No puede estar un barrio sin alumbrado. No era negociable", afirmó ayer tarde, momentos antes de recibir la confirmación de que la empresa dio una solución provisional. La definitiva llegará con la sustitución de 2.000 luminarias por lámparas LED, de bajo coste, un proyecto que subvenciona con 799.695 euros el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE).

Otro punto problemático es la estación de bombeo del paso inferior de Veigamuiños, para el cual los técnicos buscarán una solución definitiva.

Te puede interesar