El programa que diseñó para apoyar este sector incluye también el alquiler de otros 300 ejemplares
El Concello de A Veiga contará el año próximo con más de un millar de castaños (Castanea sativa) micorrizados en sus sotos. Los técnicos municipales manejan más de 40 expedientes de vecinos que solicitaron sumarse al programa "Poulas", que subvenciona la adquisición de estos árboles. La cuantía varía entre el 70 % del precio, si son plantados en sotos abandonados, y el 50 % cuando son cultivados en otro tipo de terrenos.
Las variedades de fruto por las que apuesta el Concello son las propias de la zona, de tal forma que las subvenciones serán asignadas por la adquisición de ejemplares micorrizados de amarelante o negral. La ayuda cubre la compra de un máximo de 25 árboles, oscilando las cuantías entre los 5 y los 15 euros por unidad, en función de la variedad y la cantidad subvencionable.
No es el único dato que invita al optimismo en A Veiga. Su alcalde, Juan Anta, también anunció que varios propietarios de sotos ofrecieron más de 300 árboles (200 en buen estado de conservación) al Concello. No obstante, el plazo para sumarse a la iniciativa aún está abierto, por lo que en los próximos días podría aumentar el dato. En el programa de arrendamientos, los vecinos que pusieron sus árboles a disposición del Concello por cuatro años van a recibir 30 euros por cada uno de ellos. Ingresarán esa cantidad durante el primer bienio, ganando 20 en el segundo. A su vez, los interesados en alquilar los sotos recibirán unas ayudas que alcanzarán hasta el 100% y el 50 % del coste en los dos primeros ejercicios, respectivamente.
"Cos dous programas vanse recuperar 1.100 castiñeiros. Debemos agradecerllo aos veciños, tanto pola cesión dos soutos como pola plantación de árbores novas", comentó el alcalde, Juan Anta. El regidor explicó que el programa de recuperación del rural puesto en marcha en A Veiga llevará consigo una importante reducción del riesgo de incendio forestal, a la que vez que servirá como impulsor de una más que interesante dinámica económica y también potencia la generación de empleo.
"A Veiga e o seu rural están de moda", afirmó ayer el alcalde, Juan Anta, aludiendo a un Concello de 29.048 hectáreas, de las cuales 14.010 están protegidas por las normas subsidiarias de planeamiento municipal y por la Red Natura 2000.
La mayor productiva de Galicia
El oriente provincial, Valdeorras, Trives, Viana do Bolo o Monterrei concentran la mayor parte de la producción de castaña de la provincia, siendo esta un 60 % del volumen que generan los sotos gallegos. La última campaña no fue buena para el sector. La helada, el calor y la falta de otoño afectaron al fruto, provocando una fuerte reducción de la cosecha que varía entre el 50 % y el 70% de un año normal, según la zona y las fuentes consultadas. Tanto es así que el presidente de la Indicación Xeográfica Protexida Castaña de Galicia, Xesús Quintá, calificaba la cosecha como "unha das peores".
Las estimaciones que maneja la IXP cuantifican la producción media de Galicia en torno a las 20.000 toneladas, de las cuales aproximadamente 12.000 corresponderían a la provincia ourensana. Este año, los factores meteorológicos rebajaron el dato gallego hasta las 10.000 toneladas, según los cálculos de Castaña de Galicia. A esta reducida producción hay que añadir los precios bajos por un fruto de una baja calidad.
No todos los años son iguales y si la pasada campaña quedaron erizos sin recoger, suele suceder lo contrario, debido al rendimiento de unos árboles que apenas requieren cuidados y que son una importante fuente de ingresos.
