La Navidad viguesa sigue ampliando su propuesta. Con un domingo soleado, aunque frío, visitantes y locales pudieron disfrutar de nuevos atractivos. Un día más llenaron las calles, haciendo complicado moverse en las horas puntas por los lugares más señalados, aunque la peatonalización de parte de Policarpo Sanz facilitó el tránsito. Para los más pequeños ayer fue un día especial porque Papá Noel llegó a la ciudad. Fue recibido por el alcalde Abel Caballero, quien lo acompañó a su casa. Con su inconfundible traje rojo y su larga barba blanca, reapareció en su casa de madera, situada a la entrada de Príncipe. Los más previsores hicieron cola en la puerta para entregarle las cartas o contarle las peticiones de Navidad.
Permanecerá en Vigo hasta el 24 por la tarde, apenas unas horas antes de colarse en cada hogar para hacer realidad los deseos de pequeños y adultos. Para los que aún no hayan ido a visitarlo, recibe en su casa de lunes a viernes de 17 a 21 horas; los fines de semana y los festivos hace doble turno, de 11 a 14 horas y de 17 a 21 horas, horario que mantendrá sus tres últimos días.
Con el centro llenó de gente y aprovechando el buen tiempo tras tantos días de lluvia, muchos fueron los que optaron por desplazarse a Samil. Allí se abrió el circuito de karts y la primera pista de hielo (la segunda empezará a funcionar este jueves a cielo descubierto en As Avenidas, junto a una rampa de hielo de cinco metros de ancho).
Como es habitual, mientras duren las clases, la instalación de Samil reserva las mañanas para grupos de escolares, abriendo al público en general durante la semana de 16:30 a 22 horas y los fin de semanas y festivos de 11 a 22:30 horas; las vísperas de festivos, el horario será de 11 a 20 horas, mientras en Año Nuevo y Reyes, de 16:30 a 22:30 horas. El precio por 50 minutos en pista es de 7 euros; en caso de familia numerosa, se reduce a 5 euros.
El circuito de karts, situado junto a la pista de hielo, comparte horario y tarifas.
De photocall a rutas turísticas por las luces
La bola gigante, el árbol de Porta do Sol, con los pases musicales cada media hora, donde las luces destellan al ritmo de ‘Piratas del Caribe’, ‘Frozen’ ‘El último mohicano” o John Lennon, además de la noria, abierta hasta la madrugada fueron un día más lo que mayor interés despertaron, aunque Belén Monumental, en Casa da Arte o el poblado navideño, en la Casa Galega da Cultura también recibieron una buena afluencia de público. Los motivos navideños de Príncipe, los jardines efímeros o los photocall con las letras de Vigo son las localizaciones de los miles de selfies y fotografías que se sacan estos días en la ciudad, convirtiendo a la principal calle comercial en una auténtica avenida de la fama.
El Nadal Bus, con salidas a partir de las 18:30 horas de Policarpo Sanz, es otro foco de esperas, ya que son muchos los que quieren conocer las distintas composiciones de los diez millones de luces led.
