El Concello solicitó presupuestos para un arreglo de la estructura que apremia la oposición
El estado de conservación de la pasarela peatonal que casi diariamente utilizan los vecinos de Penouta para cruzar el río Sil e ir a Vilamartín de Valdeorras preocupa en el Concello. Esta inquietud no es de ahora, se arrastra ya desde hace años, circunstancia que llevó al portavoz popular José Pinto Álvarez a reclamar su arreglo. "É un perigo", dijo el edil tras presentar el escrito en el Concello.
En el documento reclama la adopción de "medidas urgentes" en la pasarela, "debido al mal estado en que está, por falta de mantenimiento por parte de este Concello. Tiene algunos de los tensores rotos, entrando por la parte de Penouta y necesitan una revisión en su totalidad, tanto la pasarela como los accesos", dijo el concejal. José Pinto insistió en que el problema no es nuevo, "pero a día de hoy no se ha hecho nada". Apremió su reparación "lo antes posible, o el cierre al paso de personas, para así evitar un mal mayor".
A su vez, el alcalde socialista, Enrique Álvarez Barreiro, descartó la existencia de un peligro inminente, una circunstancia que solo pueden determinar a los técnicos. "Non é que corra perigo. Se o houbera, teríamos que pechala", dijo. Inmediatamente, añadió que, hace un mes, el Concello solicitó presupuestos a varias empresas para acometer su arreglo.
La estructura metálica que conforma la pasarela de Penouta fue levantada por la empresa Saltos del Sil, actual Iberdrola, el siglo pasado. Sin embargo, su titularidad corresponde al Concello, según apuntó el regidor.
El alcalde redujo las deficiencias a la rotura de un par de varillas y a la colocación de varios tacos. Enrique Álvarez invitó al portavoz de la oposición a esgrimir la opinión de un técnico alertando del peligro. "Se lle mete medo á xente imos ter un problema", dijo el alcalde vilamartinés.
Una imagen muy vista que deja mucho que desear
Las deficiencias que presenta la pasarela peatonal sobre el Sil que comunica Penouta con Vilamartín no son la única preocupación del Concello. También la imagen que ofrece trae de cabeza al alcalde, quien lleva años pensando en el embellecimiento de la estructura, aunque en estos momentos prime la necesidad de garantizar la seguridad. Ubicada en el trazado del Camiño de Inverno son muchos los peregrinos que se detienen en ella para sacarse una foto e inmortalizar su paso por ella. No son los únicos. En los últimos años, muchos jóvenes de la comarca se colocan sobre este paso para fotografiarse, llegando a convertirlo en un lugar de moda en la comarca.
